Los jeans son prendas básicas y súper femeninas, es por eso que de forma recurrente las utilizamos para armar nuestros outfits. Sin embargo, es tal el gusto por llevarlos siempre a todos lados, que la tela se daña o desgasta fácilmente.
Sin embargo, existen algunas formas de evitar o por lo menos prolongar el estado de la tela y su particular color. Aquí nuestros principales consejos para ti.
1. Lávalos a mano
Ok, probablemente te preguntarás ¿Por qué hacerlo así si tengo una lavadora en casa? Y la razón es que dentro de este aparato, la tela de los jeans sufre más por el contacto con mayor cantidad de detergente y también por el movimiento. Mejor, lávalos de forma manual. Sumérgelos en un recipiente con una cantidad mínima de jabón disuelto en polvo y deja reposar unos 20 minutos para posteriormente enjuagar.
2. Lávalos de forma contraria
Asegúrate de hacerlo de esta manera. Esto ayudará mucho más a conservar ese color azul que lo caracteriza. Digamos que es una forma de protección segura. Trata también de lavarlos con prendas similares.
3. Usa un producto especial para prendas delicadas
Evita detergentes que sean fuertes o cuya composición pueda perjudicar la tela. En este caso puedes usar jabón líquido o en polvo, y quizá un poco de suavizante. Revisa bien el producto y asegúrate que sea especial para prendas delicadas. Por nada del mundo uses productos blanqueadores.
4. Utiliza sal
Pero no la convencional, en este caso te indicamos la sal marina porque permite suavizar y conservar el color del jeans o la mezclilla. Puedes colocarla al lavar el pantalón las veces que desees.
5. Evita el lavado en seco
No lo hagas más a partir de ahora. Es un error que muchas veces cometemos por desconocimiento. Al hacerlo de esta manera, las fibras de debilitarán con el tiempo.