El embarazo es una de esas cosas de la vida donde existe un rango de años que se debe respetar, y esto no solo en el caso de la madre, sino también del padre ya que de acuerdo a un estudio, la edad del papá también puede influir en la salud física del bebé al nacer.

De acuerdo con algunos especialistas, se considera que el periodo ideal para que la mujer sea madre es el comprendido entre los 25 y los 35 años. A partir de esta edad, el embarazo se tipifica de alto riesgo.

Algo que también podría aplicar en el caso de los hombres ya que según un estudio publicado por el doctor Michael Eisenberg en el British Medical Journal, los bebés con papás que superan los 35 años de edad sufren más complicaciones después del parto como convulsiones, bajo peso al nacer y hasta problemas respiratorios.

El doctor Eisenberg y su equipo de la universidad de Stanford analizaron el estado de salud de cada bebé nacido desde el 2007 y hasta el 2016 en Estados Unidos, encontrando que los hombres de más de 35 tenían hijos con distintas complicaciones al nacer como las ya mencionadas.

En el estudio se encontró que si el papá era mayor de 45 años, existía un incremento del 14% en que el nacimiento fuera prematuro. En cuanto a los hijos de los mayores de 50 años, había un 28% de posibilidad de requerir atención en cuidados intensivos.

Otro dato relevante que reveló el estudio de Eisenberg es que entre las parejas en las que el hombre tenía más de 45 años, había más del 28% de posibilidades de sufrir diabetes gestacional, comparado con las parejas de entre 28 a 34 años.

De acuerdo con la información publicada en el British Medical Journal, esto se debe a que después de los 35 años, el ADN del esperma comienza a sufrir al menos dos mutaciones por año, permitiendo que durante la gestación se originen problemas en la salud física del bebé al nacer.

De igual forma se analizaron aspectos sociales como raza, religión, nivel socioeconómico, educativo, edad de la madre, acceso a sistemas de salud y antecedentes de adicciones como posibles factores influyentes; sin embargo, no se encontraron grandes cambios en los resultados.

Los especialistas aseguran que se consideran sólo los factores maternos a la hora de encontrar riesgos en la salud del bebé, pero se deben tomar en cuenta las dos partes; mamá y papá. Es por ello que ambos deben cuidar de su salud lo mejor posible si está dentro de sus planes convertirse en padres al final de sus treintas.

Con información del British Medical Journal.