Cuando los padres son los que se quedan a cargo de la crianza de sus hijos, se enfrentan a muchos desafíos, más un cuando tienen en casa a una niña
La crianza de los hijos es una tarea que corresponde a ambos padres en partes iguales, de ellos dependen formar a personas responsables, comprometidas y con amor, pero ¿qué pasa cuando esa responsabilidad recae solo en una persona, en este caso en el padre?
Cuando un hombre queda al frente de una tarea como la de criar a una hijo por sí solo, hay una serie de dudas que recaen en él por parte de las personas en su entorno, pues en pleno siglo XXI aun se piensa que no está capacitados para tomar el papel de madre y padre al mismo tiempo.
Es aun más complejo, cuando los padres solteros llevan una vida profesional muy ajetreada, ¿cómo saber que pondrán atención y tiempo de calidad con sus hijos? ¿qué harán en una situación en la que tienen que cuidar a una niña? El amor, la cooperación y la comprensión serán lo más importante ante los retos de un padre soltero.
Limitaciones. Desde que en el trabajo no comprendan que el padre debe cumplir con su rol de paternidad, atendiendo todos los aspectos de su hija, hasta los propios prejuicios de la sociedad que lo señalan de no poder ser un buen padre por la razón de “no ser la mamá”.
Dominar temas. Cuando los padres solteros deben dar su tiempo a una niña, debe ser capaz de comprender el mundo de la pequeña, jugar con ella a los juegos que proponga y adentrarse a ese pequeño universo, con lo que generará confianza.
Estar en dos lados a la vez. Como en el trabajo no puede disponer de mucho tiempo para pasar el tiempo de calidad con su hija, el padre soltero usa su creatividad para poder estar incluso en dos lados a la vez, el amor por su pequeña será ese aliciente que lo motive.
Los padres solteros de niñas son de los más amorosos, cuidan y protegen como leones a sus pequeñas y a pesar de los prejuicios sociales, enfrentarán cualquier reto que se les presente con tal de ver feliz a su hija.