Todos hemos disfrutado de una rica taza de té, pero pocos nos hemos puesto a pensar en cómo reutilizar esas hojas y flores ya usadas, incluso aquellas que vienen en bolsitas, todo con el fin de darles una segunda vida por medio de algún remedio casero y así seguir aprovechando algunas de sus propiedades.
Algo similar a lo que ocurre con los posos o residuos del café, los cuales también pueden aprovecharse de muchas otras formas antes de caer en el bote de la basura orgánica. Y de hecho, en el caso del té usado, algunos de los segundos usos son bastante similares.
Lo mejor es que no necesariamente tienen que ser hojas de té verde o té negro, realmente pueden ser todas aquellas plantas o flores con las que hagas infusiones, como la manzanilla, hierbabuena, anís o la que sea.
Solo recuerda que antes de darle una segunda vida al té, tienes que dejar secar muy bien las hojas o flores sueltas para que la humedad no sea un problema. Los mismo con las bolsitas, pero para estás tendrás que romperlas una vez secas para poder recolectar lo del interior.
Segundos usos del té
- Las hojas de té sirven como abono orgánico para tus plantas, basta con extenderlas sobre la tierra, después regarla un poquito y listo.
- Puedes hacer una mezcla de hierbas y flores para después quemarlas y usarlas como incienso ya sea para ahuyentar mosquitos, para disfrutar de su aroma o para realizar alguna especie de ritual o limpia.
- Al guardarlas en una bolsa abierta o un recipiente dentro del refrigerador pueden ayudar a evitar los malos olores. Lo mismo si las guardas en bolsitas de tela dentro de tus cajones o armario.
- Con las hojas de té aún húmedas y un trapo, es posible limpiar la encimera o tabla donde cortas la comida.
- Puedes hacer una segunda infusión con distintas hojas y flores y usarla como enjuague bucal natural para quitar el mal aliento.
- Si las colocas en una cubeta con agua caliente te pueden servir para desinflamar, relajar y quitar olores de los pies.
- En el caso del té de bolsita, ya sea de manzanilla o té verde, puedes colocar las bolsitas húmedas y tibias para desinflamar los ojos y reducir las ojeras.
Así que como verás, hay muchas formas de darle una segunda vida al té. Solo es cuestión de que recolectes lo suficiente y apliques el uso que te sea de mayor utilidad.