Técnicamente estamos hablando de una campana extractora, un aparato electrodoméstico que se coloca encima de la estufa para aspirar y extraer los productos de combustión al cocinar.
La campana está formada por un filtro antigrasa, un extractor y filtros antiolores. Sin embargo, de forma casi inevitable e igual que con la estufa, acumula gran cantidad de agua, humo y suciedad. No solo se ve mal, es antihigiénico.
¿Cómo desengrasar una campana de cocina?
Mantener la cocina impecable no es una misión imposible, sin embargo, hay que poner atención a los detalles. Y hacer que tu campana de cocina quede como nueva es muy fácil con estos trucos.
Usa desengrasante
Puede elegir entre las decenas de opciones que hay en el mercado, pero también puedes hacer tu propio desengrasante. Este es el paso a paso:
- Retira los filtros del extractor.
- Rocía la parte interna con el desengrasante. Deja reposar por unos minutos.
- Pasa un paño o un trapo y retira la grasa reblandecida.
- Repite las veces que sea necesario.
Con bicarbonato de sodio
Es excelente para remover el aceite y la grasa. Combate también los malos olores y la suciedad en general, además, no es abrasivo y cuida de tus electrodomésticos. Así es como debe usarse:
- Protege las parrillas de tu estufa con papel absorbente.
- En un par de ollas con agua, calienta una buena dosis de bicarbonato.
- Al primer hervor, enciende el extractor. Ve añadiendo más agua y bicarbonato conforme se necesite.
- Mantén el fuego encendido por una hora.
- Apaga el fuego cuando veas que empieza a caer la grasa.
- Limpia con un paño tanto la campana como la grasa que cae.
- Pasa otro paño húmedo con vinagre blanco por la campana.
Y listo, eso es todo. Si limpias con trapos de microfibra es todavía mejor, pues además de ser muy resistentes, absorben hasta 7 veces su peso y atrapan mayor cantidad de polvo, suciedad y agua.
Un hogar limpio empieza por una cocina sin grasa y suciedad. Pon estos hacks a prueba.