La autoestima se desarrolla y fortalece a lo largo del tiempo, comienza cuando un bebé recibe atención positiva. Así que, sin duda, los padres pueden potenciar un autoaprecio sano para sus hijos. Estas frases para elevar la autoestima son una buena herramienta.
Se trata del resultado emocional que surge de la aceptación de nuestro autoconcepto. Un niño que se siente bien consigo mismo tiene un mejor desempeño en la escuela, en el hogar y con sus amigos.
Y para eso no tienes que ser una mamá perfecta, por el contrario, aceptar que tienes heridas por sanar y cuidar de ti es el mejor ejemplo para formar a tus hijos (y a tus hijas) de forma amorosa y poderosa.
8 frases para elevar la autoestima de tu hijo
No hay nada más poderoso que las afirmaciones positivas para acompañar a tus hijos en su camino de autodescubrimiento. Así como los enseñas a orar y a agradecer lo que tienen, repite junto con ellos frases que les ayudarán a sentirse seguros de sí mismos.
Prueben con las siguientes frases:
Me alegra que seas mi hijo. Puede afianzar en ellos el sentimiento de amor que les tienes.
Estoy orgulloso de ti. Los niños quieren sentirse vistos, quieren genuinamente llamar tu atención.
Tus emociones son importantes. Sin importar si ríe o llora, un pequeñito debe saber que sus emociones son válidas.
Tu opinión es igual de importante que la de los demás. Enséñales a decir lo que piensan con respeto y asertividad.
Me importas. No pierdas de vista que los niños necesitan sentir que los quieres y escuchas.
Fracasar está bien. Déjales saber que el fracaso es parte de la vida y podrán gestionar mucho mejor sus emociones.
Iluminas mi día. Es una frase muy tierna que podría fortalecer la autoestima de tus hijos.
Eres bondadoso. Más allá de resaltar sus cualidades físicas, habla de su actitud y lo mucho que brilla cuando es bueno consigo mismo y con los demás.
Al final de cada día y, después de contarle un cuento para dormir, dile a tu hijo lo mucho que lo amas. Si te equivocaste, ofrécele disculpas, verás que tu amor y tu ejemplo van a hacerlo brillar.
Dales a tus hijos el tiempo y la atención que merecen.