Cuando se trata de hacer la limpieza del hogar hay muchas compilaciones muy efectivas para tener mis mejores resultados, sin embargo, hay algunas que jamás debemos intentar, pues más allá de si son útiles o no, pueden llegar a ser muy peligrosas para la salud, es por eso que hoy te revelaremos qué pasa cuando mezclas vinagre con cloro; ¡Nunca lo hagas!
Todos conocemos los usos del cloro para la desinfección, si bien es un producto corrosivo que incluso puede desteñir nuestra ropa y lastimar la piel si lo tocamos directamente, cuando se trata de limpiar objetos muy sucios o desinfectar superficies, es uno de los favoritos.
Por su parte, el vinagre es uno de los favoritos para limpiar la casa, es muy efectivo, poderoso y natural, es por ello que muchas personas pueden creer que combinarlos nos dará un súper poder de limpieza y desinfección, pero esto no es así y solo nos estaríamos arriesgando.
El cloro, aunque es uno de los productos de limpieza y desinfección más comunes en el hogar, debe manejarse con muchísimo cuidado y no combinarse, incluso con agentes que podrían parecer inofensivos como el agua caliente o el jabón para los trastes.
Esto pasa cuando mezclas vinagre con cloro; ¡Nunca lo hagas!
En su estado natural el cloro en realidad es un gas, el cual pasa por un proceso en el que se comprime para volverse líquido, así es posible disolverlo en agua formando una solución alcalina con sosa y finalmente tenemos el resultado comercial de hipoclorito de sodio que todos conocemos cómo cloro o lejía.
Por otro lado, el vinagre se obtiene a partir de una reacción química de oxidación en la que se transforma la glucosa en ácido acético, según explicó Jorge Roldán, químico, al medio BBC.
“Tiene efectos bactericidas porque cambia el pH (la medida de acidez o alcalinidad de las sustancias)”, señala Roldán al mencionado medio. Esa es la razón por la que algunas bacterias que sobreviven en un medio alcalino mueren al entrar en contacto con el ácido.
Por estas razones muchas personas creen que al combinarse estos productos podrías obtener una gran limpieza y desinfección, sobre todo en estos tiempos pandemicos, pero nada más lejano a la realidad.
Lo que en verdad sucede cuando se mezcla cloro con vinagre es que promovemos que la sosa que contiene el hipoclorito de sodio se neutralice y genere gas muy tóxico que puede producir efectos terribles como daño a ojos, nariz, pulmones y boca, quemaduras y paros cardiacos o respiratorios.