Los perros llevan 33,000 años con nosotros, pero para que sean felices y sanos, es esencial que puedan expresar su naturaleza también en el hogar.
Comunicación y comportamiento:
Los perros se comunican a través del lenguaje no verbal, el olfato y sonidos como ladridos. La falta de oportunidad para expresar estos comportamientos puede llevar a agresividad y otras conductas desajustadas.
Importancia del juego y ejercicio:
El juego y el ejercicio físico son cruciales para los perros. Actividades como acechar, perseguir y capturar ayudan a satisfacer su instinto de caza y mantenerlos activos, explica Félix Zaragoza, profesor de etología en la Universidad Alfonso X El Sabio.
Sociabilización:
Los perros necesitan interactuar con otros perros y humanos para su salud mental. "Son animales gregarios y requieren cubrir sus necesidades sociales y de apego socio-afectivo", comenta Zaragoza.
Instinto sexual y cambios hormonales: La castración evita la cría descontrolada y facilita la convivencia, ya que reduce la intensidad con la que los perros se acercan a otros durante los paseos, según Helena Bat, psicóloga especializada en etología.
Riesgos del escapismo:
El instinto de huida puede ser peligroso en áreas urbanas. “Escapar al escuchar un ruido fuerte puede provocar que se pierdan o sean atropellados”, advierte Bat.
Consecuencias de no cubrir los instintos caninos: La falta de estímulos adecuados puede llevar a problemas de comportamiento como ansiedad y agresividad. “Los perros necesitan guía y estimulación física y mental para entender su rol en la familia”, señala Bat.
Prevención de problemas de comportamiento: Dedicar tiempo a actividades con los perros y pasar tiempo de calidad con ellos es esencial. “El juego fortalece las relaciones sociales y el vínculo afectivo”, concluye Zaragoza.
Demostrar amor y dedicar tiempo a tu perro es fundamental para su salud y felicidad. Los perros nos brindan amor incondicional y debemos proporcionarles un ambiente que les permita expresar su naturaleza.