El abrazo de la mariposa es una técnica de autorregulación emocional que puede ser efectiva para reducir la ansiedad en poco tiempo. Esta técnica se basa en la terapia EMDR (Desensibilización y reprocesamiento por movimientos oculares), originalmente desarrollada para tratar traumas, pero que ha demostrado ser útil para controlar síntomas de ansiedad y otros trastornos emocionales.

Durante episodios de ansiedad, que pueden manifestarse con palpitaciones, tensión muscular o dificultad para respirar, el abrazo de la mariposa ayuda a calmar los pensamientos ansiosos. La psicóloga Marian Rojas Estapé destaca que este método es fácil de realizar por cualquier persona que necesite manejar el estrés.

Para llevar a cabo la técnica, se debe:

1. Sentarse con la espalda recta y los ojos cerrados o con la mirada baja, prestando atención a la respiración profunda.
2. Cruzar las manos sobre el pecho, imitando las alas de una mariposa, con los dedos medios sobre las clavículas y los pulgares apuntando hacia el mentón.
3. Alternar pequeños golpes suaves en el pecho con cada mano, comenzando con la izquierda y luego con la derecha, siguiendo un ritmo constante.

Este movimiento bilateral tiene un efecto calmante en el sistema nervioso y ayuda a disminuir los síntomas de ansiedad. Se recomienda realizar al menos ocho series de golpes alternos, deteniéndose para evaluar la reducción de los síntomas. Si la ansiedad persiste, se pueden realizar más series hasta sentir un alivio significativo.