El evento recorrió el mundo gracias a los medios de comunicación y el internet se movió desde México a cada rincón del globo terráqueo, con una mancha más al desteñido tigre –que de tanta pintura ya está todo negro cual pantera- que en materia de imagen es nuestro país.
El trueno de los balazos, en otros tiempos, no distrae la atención de miles o cientos de aficionados. Hay que recordar los días de la primera división con Zacatepec recibiendo al América, al Atlante o al Guadalajara de Chava Reyes, “El Tubo” Gómez, Isidoro Díaz y Héctor Hernández. ¿Cuántas veces no tronaron cohetes en alguna esquina del pequeño e inseguro “Coruco Díaz” sin que nadie se moviera? Lo mismo sucedía en el viejo estadio Corona de Torreón, cuando aquel equipo recibía –hará 20 años o 10- a los equipos que referimos sólo que con estrellas como Cuauhtémoc Blanco o Zague Júnior. ¿Por qué esta ocasión, con los tronidos en las afueras del estadio territorio Santos Modelo (de los más modernos del país junto con el Omnilife de Las Chivas), todos se tiraron al piso o saltaron desde las tribunas sin vallas hacia la cancha?
El temor ha atrapado a la sociedad mexicana y un reflejo son los sucesos del sábado en el TSM de la Comarca Lagunera, región violenta, con grupos armados desafiando a las fuerzas del orden, a los militares, a los marinos. No hubo una sola vida que lamentar, sin embargo es de los acontecimientos más comentados de la cruenta guerra contra el narcotráfico, por encima de los cientos de asados por “El Pozolero” de Tijuana ni con los casi 80 indocumentados centroamericanos enterrados en Tamaulipas.
Triste y contundente realidad social: la burra no era arisca…
Jaloneo legislativo
Los avisos colocados en los medios ayer por el diputado Omar Guerra Melgar, anuncian un tercer periodo de sesiones en el Congreso Local, de tronío. Han pasado dos años que llegaron, el tiempo cual agua, y sólo en el cierre anterior lograron acumular números en su cuenta. Lo demás ha sido en más oscuros que claros.
Vamos entendiendo lo que señaló nuestro paisano Omar:
1.- Que no van a permitir que vía una movilización de un joven apellidado Yáñez que el senador del PRD Graco Ramírez Garrido Abreu se les meta hasta la cocina con lo de las candidaturas ciudadanas.
2.- Que el mensaje lleva también la dirección de la diputada perredista Hortensia Figueroa Peralta, a quien por derecho de piso y de ley le corresponde encabezar la Junta de Coordinación Política, porque le atribuyen lazos políticos con Graco.
Ambos puntos generan discusión de manera natural. No es Julio Yáñez ni el partido que hace tres años impulsó junto con su padre Roberto, que hoy tiene a éste como regidor de Cuernavaca, quien se beneficia con las candidaturas ciudadanas, sino Graco Ramírez, según Omar Guerra. Los números no fallan e indican que la mayoría de los mexicanos en condiciones legales de votar, se abstienen, que no gustan de la participación o han dejado de creer en la partidocracia. Esto hace válida la posibilidad de un ciudadano como candidato. Tampoco quiere decir que sean Los Yáñez quienes logren el milagro. O que Graco capte a este contundente número de votantes en su beneficio. Él quiere y puede ser el candidato del PRD a gobernador, nunca de Convergencia y el PT si están con López Obrador. Si su paisano Andrés Manuel cambia de opinión a su favor, esa sí será noticia, porque en privado y sobre todo públicamente han referido su animadversión mutua.
En segundo punto es, a la vista sencilla, un agandalle político de la mayoría que, parece, será reflejo de las cámaras mayores en el centro del país. Es el año electoral y los órganos de poder hay que tenerlo, así se entiende la posición de la bancada priista. Sin embargo, los 16 priistas –con Rufo y su asesor Chabelo- requieren de cuatro votos más para la reforma constitucional. Y en otro sentido aunque numéricamente más cortos, están los otros con el PRD. El primer año el coordinador de los tres diputados perredistas fue Rabindranath Salazar Solorio, el segundo Fidel Demédicis y este lo será Hortensia. Así, de acuerdo con la costumbre y los usos, la Junta de Coordinación la debe manejar este año el Partido de la Revolución Democrática.
¿Qué va a pasar? Ya falta menos para que arranque el tercer periodo, los 30 legisladores van a tener la lupa encima.