Lo anterior, que es muy claro en la teoría, en el México del siglo XXI está presente. Carlos Slim el hombre más rico en la tierra, que goza de concesiones para telefonía fija y móvil a través de dos empresas muy emblemáticas, Telmex y Telcel, tiene poder dominante de mercado, en el primero controla el 80% y en el segundo el 70%, ha utilizado por años todo el poder de su dinero, que es mucho, para mantenerse intocable e incrementar su riqueza.
Historia de abusos
En dos ocasiones la comisión de competencia ha determinado que Telmex y Telcel son dominantes en sus respectivos mercados y no ha pasado nada. Por su parte, la Embajada Americana en México en el cable secreto 08MEXICO2187 escribió: "Slim… y otros, han usado su poder para influir en políticas económicas y en el sistema, para impulsar sus intereses de negocios y obstaculizar a sus competidores"; asimismo, la Canitec, Cámara Nacional de la Industria de Telecomunicaciones, ha acusado al multimillonario de utilizar su poder de mercado para obstaculizar la competencia y obtener rentas extraordinarias. Por último, la OECD en días recientes publicó un estudio exhaustivo sobre México y el sector de las telecomunicaciones, concluyendo que “los márgenes de rentabilidad de Slim casi duplican el promedio de la OECD” y “Temex y Telcel han logrado evadir la regulación asimétrica aprovechando este sistema y obteniendo la suspensión judicial de las decisiones de regulaciones que los afecta a ellos o a sus recursos”.
Ante lo anterior, el empresario recurre a lo que siempre ha hecho cuando se le quiere regular y bajar sus ganancias extraordinarias, apela a falacias argumentativas, descontextualiza, utiliza verdades a medias y exhibe su desconocimiento sobre temas económicos.
Falacia Argumentativa: Argumnetum ad Hominem
Descalifica a quien se atreve a decir que goza de poder dominante y de rentas extraordinarias, su ataque va contra quien lo dijo, no contra lo que dijo: “vienen, pontifican y se van; y cuando estuvieron a cargo de muchas responsabilidades, no resolvieron los problemas que hoy plantean”. Así es como respondió Carlos Slim al Secretario General de la OECD, José Ángel Gurría, para descalificar lo que publicó recientemente esa organización; centrando su argumentación en que Gurría no hizo bien la cosas cuando fue servidor público en México, creyendo que con eso ya contestaba y evitando así entrar en el problema real: la dominancia de que goza y sus rentas extraordinarias.
Descontextualiza
Cuando dijo "… ¿monopolio qué quiere decir?; si tenemos menos de 100%, quiere decir que hay otros competidores, por lo que es otra mentira (de la OCDE)". Habría que recordarle a este señor que no sólo hay que regular los monopolios, sino también donde haya empresas con poder dominante de mercado, como es el caso de la telefonía móvil y fija. Y resulta que el multimillonario participa en dos mercados oligopólicos y además tiene predominio en ambos. Dicho por muchos y sufrido todos los días por los usuarios mexicanos.
Exhibe su ignorancia sobre temas económicos
Slim declaró “la pérdida económica se estima en 25 mil 800 millones… No sé de dónde sacaron esa cifra. Es una fantasía, una locura; es irracional… una jalada de pelos… Ni Telmex ni Telcel juntas generan ventas por esa cifra… Entre las dos empresas venden 17 mil 500 millones de dólares cada año”.
Pero hay que aclararle a este oligopolista que en la economía el costo de un producto o servicio tiene dos componentes: las ganancias de sus empresas y, el costo para la sociedad en su conjunto. Según el estudio de la OECD, las ganancias de sus empresas representan aproximadamente la mitad del costo total; pero hay un costo de oportunidad por las líneas no contratadas o negocios no realizados debido al alto precio de las telecomunicaciones. Para mayor claridad citemos algunos ejemplos: primero, el caso de un secuestro, una cosa es lo que se paga por el rescate y otra el daño social que es mucho mayor porque se ahuyenta la inversión debido a la criminalidad y esto es lo que se conoce como el costo de oportunidad en la jerga técnica; otro ejemplo, la venta de un producto en mal estado o contaminado, donde una cosa es lo que gana el vendedor y otra es el costo para quien se enferma, de tal manera que la ganancia que obtiene quien vendió este producto es inferior al costo que registrará quien lo compró ya que además del precio de compra incurrirá en gastos adicionales de medicina y hospitalización.
Quizá deberíamos recordarle el consabido dicho “el desconocimiento de la ley no nos exime de su cumplimiento”. No porque desconozca el concepto de costo de oportunidad, este no existe.
Usa los espacios públicos sin pagar
Siempre arguye en referencia a los competidores que, "lo que sí queremos es que inviertan, que no se cuelguen de nuestras inversiones"; pero omite decir que en los espacios públicos donde está su cableado no paga ningún tipo de impuesto municipal, argumentando que son muy importantes las telecomunicaciones y que son una concesión federal. Como si la labor de un doctor o de quien vende comida no sea importante; así con su lógica todas las actividades deberían estar exentas del pago de cualquier tipo de impuesto local. Si usa los espacios públicos con sus casetas telefónicas o con su fibra, que pague impuestos, así de sencillo. O todos coludos o todos rabones.
Cambia las fechas
En sus críticas contra el estudio de la OECD enfatizó “…está usando (la OCDE) cifras de 2008 y 2009; tendría que estar hablando de las de 2011”. Dice que el estudio debería referirse al 2011, su estrategia es negar todo. Pero por la naturaleza de esas investigaciones, se tienen que circunscribir a un tiempo. En todo caso, lo más que podría hacer es reconocer que abusó de los mexicanos en esos años, pero que ahora ya no; sin embargo, ese argumento es tan falaz como que un violador diga a un juez que no es culpable porque la violación ocurrió en una época pasada y en este preciso instante no está violando a nadie y por lo tanto debe ser eximido de castigo alguno.
Los oligopolios son inaceptables… cuando son de otros
Cuando otros dos oligopolistas, Televisa y TV Azteca, le subieron el precio de la publicidad en la televisión se quejó que ese comportamiento comercial es inaceptable, retirando los comerciales, además un alto funcionario de sus empresas declaró, “es un abuso” el precio de la propaganda en la televisión.
Y para concluir, la Constitución dice muy claro:
Artículo 28. “En los Estados Unidos Mexicanos quedan prohibidos los monopolios, las prácticas monopólicas… en consecuencia, la ley castigará severamente, y las autoridades perseguirán con eficacia, toda concentración o acaparamiento en una o pocas manos”.
Por el daño económico que ya generó y que quiere seguir causando, se le debe aplicar la ley que claramente prohíbe los oligopolios y la concentración. Y evitar que los mexicanos sigamos siendo abusados por este multimillonario.
Hasta aquí el artículo galardonado. Estimados lectores hasta la próxima semana. Este análisis se publica en varios periódicos impresos y electrónicos, gracias.
2 comentarios
Hey
Gracias por su comentario Compartelo!
Hey
Vaya, que bueno que se reconoce la lucidez, la valentía, el trabajo… Compartelo!