Por si se les ha olvidado, obreros, comerciantes, amas de casa, todos los maestros, se sumaban en las calles de la ciudad hasta hacer miles y miles. Un ejemplo: llegaba el primer grupo a la Plaza de Armas para encarar a los inquilinos del Palacio de Gobierno –lo de Casa del Pueblo se tiene que probar en los hechos e instalarse con acciones, no es por gustos u ocurrencias—y “la cola” caminaba saliendo del Chapitel en El Calvario, en una palabra cubrían todo Matamoros, Galeana, doblaban en Hidalgo y el centro temblaba. Nunca hemos presenciado movilizaciones voluntarias tan numerosas como esas de los maestros del CCLM. Nunca. Ahí andaba Fidel.
Así que no nos extraña que haya tomado la imprenta donde se hacían las boletas para la elección de delegados estatales en Morelos, allá en el DF, y haya hecho una especie de incautación “revolucionaria”. Puede mostrarse como un hecho de reto total a las nuevas autoridades de la visión gobernante, a un partido que sigue viéndose frágil desde una dirigencia con un hombre totalmente grisáceo y carente de la menor personalidad como es el ingeniero Abel Espín, pero una realidad es el trabajo que le cuesta al gabinete de Graco Ramírez ganar un espacio de respeto, agreguemos que están desatados los hilos institucionales de su plataforma partidista. Ahí sí, tendrán que aprender del PRI y del PAN, porque la suspensión de una elección del tipo que sea en un partido que detenta el poder del gobierno estatal, es inédita. La recién inauguró el PRD Morelos.
Pero lo compartimos: o algo se tramaba para hacer un cochupo o Fidel Demédicis, senador de la República llegado por el PRD, advirtió que a su grupo –que es de los tres predominantes en la entidad—lo iban a machacar. Ellos saben, pero es un tema público que vale la pena tratar. Al interior de las filas del Sol Azteca, saben quién y cómo es Fidel, pero le comentamos al ciudadano lector y amigo, a los apartidistas y los que militan en cualquier partido, que el hoy senador no es monigote que vaya a aguantar cosas sin razón. Ya empezó y es, normalmente, insistente en que la congruencia de izquierda no pierda su cauce.
En vía de mientras, les ha caído en el hígado al grupo en el nuevo y visionario poder. Saben que no es una piedra en el zapato, va más allá, lo saben, lo saben…
Educación, a revisión…
Sus razones tendrá el mandatario Graco Ramírez Garrido Abreu al encarar frontalmente al SNTE, los acuse de “cochupear” comisiones con bancos en el pago de los profesores, luego le exijan una pública disculpa, posteriormente se reúna presuntamente de manera cordial con los mismos y, al final, René Santoveña, secretario de Educación diga que podrían cambiar de institución bancaria en el pago de la nómina a los maestros. Sabemos el tamaño de recursos que manejan las instancias de educación, se ha dicho siempre de los robos abiertos que en ellas suceden, incluso documentamos cómo en el pasado sexenio, el subsecretario Joel Juárez Guadarrama hizo “una finanza” con dineros de la secretaría, y de gobiernos procedentes del pueblo, y puso una cuenta bancaria de casi 12 millones de pesos a nombre de una familiar.
Nunca ha pasado nada. Es cierto, lo dice Guillermo Cinta en su “Punto y Aparte”, si el gobernador tiene toda esa información la tiene que denunciar. Ya estuvo de lanzar advertencias o cubrir espacios sucios. Que Graco termine con la leyenda urbana de que cuida intereses de Marco Adame. Hoy no es el crítico político de oposición. Es el gobernador. Sus palabras son contundentes, mentiras o verdades. Ya no es una voz desde la oposición. Es la voz oficial y lo tiene que entender.
Que tope donde ajuste si en educación hay mugre. No es válido. El futuro del país y de nuestra tierra, los niños en formación, no se lo merecen. O verdades completas o de plano, no decir nada. Diría el talentoso Sergio Esquivel: “cada quien vaya ocupando su lugar… la fiesta va a comenzar”.