El joven Eder Geovanni Hernández Aranda, quien fungió como funcionario de casilla en la elección federal del 2015 y resultó con quemaduras en el brazo y mano porque una persona quemó urnas, dio a conocer esta mañana que lleva varias cirugías y el Instituto Nacional Electoral (INE) no ha cubierto todos los gastos; consideró además que la población debe exigir seguridad para participar como funcionarios de casilla.
Expuso que es necesario que se garantice la seguridad con elementos del Ejército Mexicano y fuerzas armadas, pues no hay policías suficientes, al tiempo de referir que el día que ocurrió el incidente sólo había un agente que se retiró antes de que lanzaran el frasco con combustible.
De igual modo, aseveró que tampoco hay una ley ni seguros que protejan a ciudadanos que participan como funcionarios de casilla.
También destacó que, a tres años, no hay ningún responsable aunque hubo denuncias por los daños y por delito electoral.
Mencionó que él era universitario y sus padres han tenido que pagar alrededor de 500 mil pesos, pues sólo recibió recursos de un donativo de 17 mil pesos del bolsillo de consejeros nacionales del INE.
Finalmente, consideró que la población debe exigir seguridad para participar como funcionarios de casilla, y además demandar al INE que responda.