La marcha partió en la iglesia de Acatlipa, terminando en la presidencia municipal de Temixco. La madre de Gisela Mota mencionó a las autoridades estatales y federales que en caso de que no esclareciera el asesinato de su hija, en toda sus consecuencias con los responsables, tanto materiales como intelectuales se recurrirá a instancias internacionales.
También refirió que existen algunos medios estatales y nacionales que habían desacreditado a su hija y la lucha social que ella sostenía, y en este caso demandaría a estos medios. "Gisela era una persona legítima, honrada, trabajadora y una luchadora social", afirmó.