La falta de estímulos desalienta a productores.

Cuautla.- La falta de incentivos oficiales y los altos costos de operación han provocado que numerosos productores de caña hayan cambiado de cultivo y otros más se hayan ido a otras organizaciones donde encuentran mejores condiciones, reconoció Andrés García Cortés, presidente de la Asociación de Productores de Caña de Casasano de la Confederación Nacional de Propietarios Rurales (CNPR).

Destacó que, durante varias zafras, los costos de operación con esta organización cañera eran más bajos que en otras agrupaciones, lo que provocó que más campesinos se sumaran al cultivo de la caña; sin embargo, con la gestión de Ignacio Sandoval Alarcón, los costos se dispararon, al grado que tuvo prácticamente que abandonar el cargo por las deficiencias en su administración. 

Lo anterior repercutió severamente en los ingresos de los productores de caña, a tal grado que los que cuentan con una superficie pequeña tuvieron que cambiar al no convenirles los gastos por las pocas ganancias que recibían, indicó.

Aseguró que el reto de la organización cañera es el de abatir los costos de operación, pero en la presente zafra no será posible debido a que muchos de los contratos, tanto con el Ingenio Casasano como con los camioneros y los cortadores de caña, ya estaban hechos.

García Cortés manifestó que el año pasado recibieron más de siete mil pesos de parte del gobierno federal como estímulo para el cultivo; sin embargo, este año dicho programa está parado debido a que no se han publicado las reglas de operación.

Aunado a lo anterior, la temporada de renovación del cultivo está encima, por lo que tendrán que recurrir a otras fuentes de financiamiento para no retrasar el nuevo ciclo de la caña.