Niegan el pago de cinco quincenas al personal suplente, aseguran trabajadores; anuncian que ya preparan movilizaciones.
Cuautla.- Presuntos abusos por parte de los directivos de la Clínica Hospital “Rafael Barba Ocampo” del ISSSTE de este municipio fueron señalados –mediante una carta dirigida a los medios de comunicación– por trabajadores de ese nosocomio, quienes manifestaron su preocupación por que las negligencias pongan en riesgo a los derechohabientes.
Luego de pedir no dar a conocer sus nombres, manifestaron que la mayor afectación la sufre el personal suplente, el cual es tratado con injusticia, ya que les han negado el pago de cinco quincenas atrasadas, las cuales se sumarán a la próxima, sin que haya una respuesta positiva.
Aseguran que, para cansarlos, les dan “trato de esclavos” al obligarlos a trabajar sin sueldo.
En este sentido, refirieron que los obligan a cubrir guardias de 24 horas y en caso de negarse, son denunciados para que les apliquen sanciones y cuando solicitan una explicación, la jefa de Recursos Humanos se niega a responder con claridad.
Afirman que a los trabajadores suplentes se les fijó un pago de 35.6 pesos la hora trabajada, lo que ni siquiera se acerca al salario mínimo.
Señalan que los directivos se encargan de manifestar que los trabajadores suplentes “no sirven para nada”, a quienes dan un trato violatorio de sus derechos humanos al negarles los servicios médicos, a pesar de que saben que enfrentan riesgos de contagios.
Además, el documento detalla que cuando los afectados acuden a solicitar su salario, les inventan cargos para obligarlos a trabajar más allá de sus obligaciones.
Al respecto, acusan a la jefa de Enfermeras de apellido Arias de dirigirse a ellos con prepotencia, negándose a establecer los calendarios de vacaciones y procedimientos para las incapacidades.
También destacan que incluso las secretarias tienen la indicación de mostrar una actitud apática cuando los suplentes pretenden meter sus suplencias.
Por todo lo anterior, preparan una serie de movilizaciones para denunciar la situación de acoso y maltrato que sufren, ante la actitud de los directivos, “quienes saben de antemano que muchos compañeros dependen de los pagos para sostener a sus familias, escuela, pasajes, comidas, y gastos personales”, agregan.