Combaten sobrepoblación canina para contener problemas de salud pública.
Cuautla.- A pesar de los esfuerzos desplegados por las autoridades sanitarias de los tres niveles de gobierno, la rickettsiosis que brotó desde hace 16 años en colonias de la parte oriente de este municipio aún persiste como un problema de salud pública que hay que contener, señaló Ismael Jorge Domínguez Gómez, coordinador de Zoonosis Municipal.
Dijo que los casos de rickettsiosis que afectaron a la población de la colonia Iztaccíhuatl –caracterizados por fiebre, escalofríos, sudoración, dolor de cabeza, sensibilidad a la luz, dolores musculares y erupciones en la piel– son transmitidas por pulgas y garrapatas en comunidades suburbanas donde prevalece aún la ganadería.
Sin embargo, dijo que es la sobrepoblación canina la que propaga el vector a las casas donde se contagian los humanos, de ahí la importancia de mantener un continuo control de la salud animal, mediante la desparasitación, vacunación y esterilización para frenar la reproducción descontrolada de mascotas y perros callejeros.
“Estamos precisamente analizando esa situación; por eso estamos aplicando la desparasitación gratuita, que incluye control de garrapatas, para manejar ese control con los caninos porque en las colonias suburbanas o de nueva formación que tienen todavía ganado, el problema es con las vacas que están en convivencia con los seres humanos y sus perros y esos perros se llegan a infestar de garrapatas y eso hace que haya brotes en algunos puntos y es peligroso”, indicó Domínguez Gómez.
El funcionario manifestó que las localidades donde existe el riesgo latente son Tetelcingo, Iztaccíhuatl, Casasano y Ex Hacienda El Hospital, que tienen muchas áreas rurales donde se crían animales como los bovinos. “Porque sí hay rickettsia; es parte de nosotros controlarlas y la mejor manera es desparasitando a los caninos, sobre todo en esas comunidades con más incidencia de ganado vacuno”, insistió.
Destacó que hasta ahora, mediante las ferias de la salud canina y felina, se ha logrado esterilizar a más de un millar de animales y se han aplicado vacunas antirrábicas a más de dos mil mascotas, para mantenerlos bajo control.
Gracias a la colaboración de las asociaciones protectoras de animales y a la buena respuesta de los propietarios de mascotas, se ha logrado controlar la sobrepoblación.
“Una sobrepoblación canina es problema de salud pública; en este momento no es tan grave porque gracias a las asociaciones se ha llegado a un punto de equilibrio. No se ha controlado al 100 por ciento, pero gracias a esas organizaciones se han logrado integrar colonias a las campañas”, afirmó.