Fueron insuficientes las dosis enviadas para las personas de 60 años y más.

Jantetelco.- El desorden y la falta de información con la que se llevó a cabo la aplicación del refuerzo de vacunas anticovid para adultos mayores de 60 años de este municipio provocó el malestar  de quienes hacían fila desde las cuatro de la mañana, los cuales estuvieron a punto de derribar el portón del auditorio Amatzongo, donde se ubicó el módulo de vacunación, luego de que les avisaron que se habían agotado las dosis.

En este mismo lugar, la Brigada Correcaminos también convocó a los adolescentes de 15 a 17 años de edad para recibir la primera dosis de la vacuna Pfizer, lo que ocasionó severas aglomeraciones por la gran cantidad de personas que acudieron.

En el lugar se formaron tres filas: una para los adolescentes de 15 a 17 años, otra para las personas con alguna discapacidad física y los adultos de 60 años y más, quienes durante horas esperaron bajo los rayos del sol, sin ningún tipo de protección, sin sillas, agua o alimentos.

El malestar inició cuando pasaban de las 10:00 horas y la vacunación no iniciaba, lo que generó descontento entre las personas que estaban desesperadas por acceder a recibir la vacuna. Las filas de personas llegaban poco antes de los límites con el municipio de Temoac.

Fue alrededor de las 11:00 horas cuando inició la aplicación de las vacunas, por lo que fueron ingresando de manera simultánea los adolescentes y las personas mayores; sin embargo, alrededor de las 14:15 horas, un médico salió a decirles que las vacunas para las personas de 60 y más años, de la farmacéutica AstraZeneca, se habían agotado.

Tal anuncio ocasionó el enojo de los asistentes, quienes se arremolinaron frente al zaguán del auditorio y al ver que no los atendían, trataron de derribarlo para exigir una explicación.

Los ciudadanos denunciaron que ningún funcionario de la Secretaría del Bienestar o de la Brigada Correcaminos les dio la atención de informarles sobre la cantidad de vacunas aplicadas, ni si habrá más fechas de vacunación; únicamente les dijeron que ya no había vacunas.

Tuvieron que ser los elementos de la Policía quienes salieron a contener a las personas para evitar que irrumpieran en el interior, donde se encontraban las células de vacunación.

Los policías les explicaron que lo único que sabían era que se habían acabado las dosis de vacunas y que posiblemente sería hasta enero cuando se reanudará la vacunación para aplicar la tercera dosis de refuerzo.

Ello alteró más a los presentes, quienes aseguraron que únicamente se vacunó a alrededor de 200 personas y más de dos mil se quedaron esperando.

Al cierre de esta edición no hubo información oficial acerca de cuántas dosis fueron aplicadas ni cómo continuarán las jornadas de vacunación.