Dudas en el manejo de los recursos fue el origen del conflicto en el Cabildo.
Tlalnepantla.- Después del conflicto propiciado por el desconocimiento de Ángel Estrada Rubio como presidente municipal de este lugar por parte de los integrantes del Cabildo y de que se iniciaran procedimientos legales por supuesta usurpación de funciones, en contra de dos regidores y la síndica municipal, la calma parece haber regresado al municipio y el alcalde pudo volver a sus oficinas del palacio municipal.
Así lo confirmó el propio primer edil, quien aseveró que han llegado a acuerdos que permiten trabajar en armonía, al darse cuenta que fueron malos entendidos entre la síndica, los regidores y el alcalde.
“Afortunadamente los regidores y su servidor hemos llegado a acuerdos importantes; hoy estamos trabajando al 100 por ciento para beneficio de los tlalnepantlenses. No es una cuestión personal, es una cuestión de darle a la sociedad lo que necesite”, señaló.
Reconoció que aún prevalecen las demandas en las instancias correspondientes, a las que seguramente seguirá un desistimiento por ambas partes. “Estamos todavía en las demandas, aún están asentadas en las diversas instancias, pero creo que las vamos a retirar porque ése fue el acuerdo para poder avanzar dentro del aspecto político y que beneficie a la gente del pueblo. Éste es un conflicto al interior y nada tenía que ver el pueblo”.
Estrada Rubio también aceptó que las diferencias entre los integrantes del cuerpo edilicio fueron por el tema del manejo de los recursos económicos, en donde salieron a relucir acusaciones de presuntos desvíos de recursos, nepotismo y acaparamiento de los servicios, pues hubo señalamientos de que el alcalde tenía una gasolinera en su casa donde abastecía a los vehículos municipales y patrullas de la Policía.
Al respecto, el edil dijo que el abastecimiento de combustible sí se realiza en su casa, con el propósito de ahorrar, pues el hecho de que los vehículos bajen hasta Tlayacapan a cargar gasolina representa gastos estratosféricos, por lo que se determinó concentrar ese servicio en su domicilio, pero con fines de ahorro.
“Como en todos los ayuntamientos, la situación de la economía del Ayuntamiento… Pero como lo digo, yo llegué a cuidar las arcas del Ayuntamiento, cuidar que se gaste menos que antes. Por eso hoy en día esa parte nos llevó un conflicto, pero hemos llegado a un acuerdo en la parte económica, ayudando a los diferentes actores como son los regidores y trabajadores. La economía no está muy bien que digamos”, aseguró.