De acuerdo con el presidente de la delegación 514 del MUNJP, Isaac Rosales García, “pongo como ejemplo mi caso, en que toda mi vida he luchado para tener un pequeño patrimonio. Estoy lejos de vivir con lujos, pero por el hecho de vivir en una ciudad como Cuautla, no soy apto para recibir un apoyo social de esa naturaleza”, apuntó.
De hecho, la Sedesol considera que “debido al aumento de la esperanza de vida, los mexicanos de 70 años y más pasarán de 3.1 millones en el año 2000 a 4.8 millones en el año 2012, aumentando en más del 50 por ciento la magnitud de este grupo poblacional. De esta manera, en el país cada vez habrá más adultos mayores hasta que en el año 2050 se presentará una proporción de 85 adultos mayores de 70 años por cada 100 menores de 15 años”.
Nos dicen que las condiciones del área en que vivimos nos hacen inviables, pues estamos en mejores condiciones que quienes están en las zonas rurales. Pero, agregó, “en mi caso, cuando llegué a vivir al sitio donde adquirí un pequeño terreno era un espacio sin servicios, con graves carencias, y fue a través del tiempo y de nuestra inversión como se lograron esas mejoras, y hoy nos damos cuenta que ese trabajo hoy nos cuesta discriminación, como a muchas personas más”.
Tras decirse sabedor de que existen reglas de operación del programa, señaló que “éstas fueron elaboradas por funcionarios del gobierno y pudieran ser igualmente cambiadas, con la intención de evitar que la gente mayor sea tratada de esta manera. Deberían de hacer estudios socioeconómicos y un estudio de campo para hacer más efectivo dicho programa”, concluyó.