Desde hace más de medio año, los vecinos de la zona denunciaron el riesgo que representa para los peatones y para los vehículos, el socavamiento que se empezó a registrar en dicha avenida a la altura de la entrada del balneario El Almeal, como consecuencia de la improvisación y los materiales de mala calidad que fueron utilizados, y que el ayuntamiento permitió se aplicarán en su repavimentación.
Los denunciantes señalaron que durante meses, todos los días han visto cómo poco a poco la tierra se traga la carretera, afectando a los dos carriles de esa vialidad y poniendo en riesgo la vida de numerosos automovilistas y pasajeros del servicio de transporte colectivo, que tienen la necesidad de pasar por ese lugar. Estiman que el hundimiento se debe a que no se realizaron de manera correcta, las obras de protección de los manantiales que pasan por debajo, por lo que hay el temor de que el hundimiento se trague a los vehículos o a las personas.
“A esta calle la hemos bautizado como la calle del terror, porque si no caes en este hundimiento, te puedes electrocutar con los cables que están colgando de un trasformador más delante, o te puede caer la piedra con la que el ayuntamiento sujetó una lona, el ayuntamiento no le importa la ciudadanía”, señaló la señora Erika Carmona.
Señaló que las pésimas condiciones de las calles y avenidas antiguas, sumado a los pésimos trabajos de las obras nuevas, están ahuyentando al turismo porque el Ayuntamiento de Cuautla no hace caso a sus reclamos, “no es posible que las autoridades no estén haciendo nada porque esto lleva más de seis meses que está en estas condiciones. No sé qué materiales estén ocupando porque son pésimos, es una calle muy transitada, los turistas que van al balneario Agua Hedionda se llevan una pésima imagen de nosotros”, lamentó.