La anterior es sólo una de las deficiencias que los transportistas de la región oriente han detectado en la nueva legislación, en la que participó activamente el entonces secretario de Movilidad y Transporte (SMyT), David Gómez Basilio, quien mal asesoró al titular de la comisión en el Congreso, Roberto Yáñez, para su integración.
Al dar a conocer lo anterior, Rafael Franco Melgarejo, presidente del Movimiento para el Cambio Transportista y Grupo de Morelos, dijo que dicha ley representa un grave retroceso que se revertirá negativamente contra los usuarios de la entidad.
“La ley se aprobó el 26 de marzo de este año, la cual tiene muchos problemas jurídicos vacios, se contempló más al transporte público y se dejó fuera al transporte vehicular, y dentro del transporte público no viene ni contemplada la Revista Mecánica, una situación muy delicada para el transporte público y para la seguridad de los usuarios”, apuntó.
Destacó que es urgente “una cirugía mayor” a la nueva Ley de Transporte del Estado de Morelos, debido a que en las condiciones en las que fue aprobada no corresponde a la realidad que se vive en el transporte público en Morelos. Se estima que por lo menos la ley deberá ser modificada en un 80 por ciento de sus 147 artículos.
Manifestó que los errores cometidos por David Gómez Basilio, además de representar un gasto obsoleto, representan un grave retroceso para el estado de Morelos.
“Es un retraso administrativo, un retraso en la modernización del transporte público, un atraso en comparación con otros estados en materia de transporte, eso urge para que podamos tener mejores posiciones en cuanto a bases, sitios, recorridos de rutas, que también no marca bien las sanciones, que se combata al pirataje, que haya candados para la expedición de concesiones, que no quede abierto, que se regulen las cesiones de derechos, la venta de concesiones y las cesiones de derechos de las mismas concesiones”, insistió.