Su objetivo al recorrer las plazas cívicas de la región oriente, es prevenir la vinculación de jóvenes y adolescentes en las adicciones, como son las drogas, alcoholismo, tabaquismo y a través de la estimulación de la interiorización de los valores, convivencia, el sano aprovechamiento del tiempo libre, el desarrollo de los valores en los jóvenes y adolescentes de la comunidad como estrategia de educación experiencial e incidir a favor de la convivencia y en el rescate de la transformación de los patrones culturales de la comunidad relacionados con el uso de la violencia como forma de alcanzar los objetivos, resolver los conflictos a lograr la visualización de la práctica de los valores como una alternativa que puede hacer parte del proyecto de vida del joven.
Al finalizar el proyecto esperan lograr una nueva visión de desarrollo que contribuya desde una perspectiva integral y sostenible a la búsqueda de la paz y los propósitos colectivos de reconciliación, con el fin de aportar al bienestar y la cohesión social, prevención de violencia, resolución pacífica de conflictos y educación.