Ayala.- Un grupo de habitantes del poblado de San Pedro Apatlaco del municipio de Ayala se enfrentaron este martes con elementos antimotines del Mando Único, en las inmediaciones del puente que une a los municipios de Cuautla y Ciudad Ayala, lugar donde se construye el acueducto que pretende llevar agua a la termoeléctrica de Huexca.

Los vecinos se empezaron a reunir desde temprana hora, ya alrededor de las 10 de la mañana tocaron las campanas y convocaron a derribar las vallas metálicas que la constructora del acueducto había colocado, impidiendo el paso a la cancha de básquetbol y el paso peatonal de los vecinos.

El brote de violencia se registró en el lugar, donde ejidatarios de varios municipios realizan un plantón desde el pasado domingo para evitar la conexión del acueducto, pero los ejidatarios no participaron en la confrontación con los policías.

Después de un tercer enfrentamiento, arribó al lugar del conflicto el  helicóptero de la Comisión Estatal de Seguridad (CES), el cual realizó vuelos rasantes en la zona, para intimidar a los manifestantes, lo que calentó más los ánimos desatándose una confrontación con piedras.

Los ejidatarios que mantienen su plantón pacífico, se deslindaron de la violencia y aseguraron que el enfrentamiento lo iniciaron personas del poblado ajenas a su lucha, por lo que convocaron a sus compañeros a no caer en provocaciones.

Poco antes de las 14 horas arribaron más elementos antimotines al mando del coordinador general del Mando Único Francisco Javier Viruete Munguía, quien implementó un operativo apoyado en el helicóptero y el camión blindado conocido como Tiburón. Lo anterior, luego de que se identificarán como los instigadores a un grupo de jóvenes, los que presuntamente integran una pandilla en esa localidad.

De manera extraoficial trascendió que la violencia mostrada por el grupo de habitantes, se derivó de la versión que se difundió en la localidad de que supuestamente el agua potable de la que disponen seria desviada a la termoeléctrica. Es por eso que acudieron a derribar las vallas metálicas y a desalojar a los policías que se encontraban en la cancha de básquetbol, donde se encuentran las instalaciones de su sistema operador de agua.

Los policías se abrieron paso lanzando gas lacrimógeno y al avanzar por las calles de San Pedro Apatlaco, se encontraron con barricadas que los manifestantes habían colocado con piedras y llantas, a las que habían rociado gasolina y prendido fuego.

Viruete Munguía señaló que el saldo del enfrentamiento fue de siete policías lesionados con piedras y cinco personas detenidas y anunció que el operativo continuaría hasta detener a los líderes, quienes ya estaban identificados.

El ambiente en ese lugar es de tensión, ante el temor de que los agresores se reagrupen y acudan de nueva cuenta a recuperar las instalaciones de su sistema de agua.