El Ejército de los Estados Unidos (EUA) dio a conocer este 2 de febrero que se estarán separando de sus puestos de servicio a los soldados que se nieguen a ser vacunados contra la COVID-19.
De acuerdo a un comunicado, los comandantes deberán iniciar procedimientos de separación administrativa involuntaria contra cualquier soldado que no desee aplicarse la vacuna contra la COVID-19 y no tenga una solicitud de exención aprobada o pendiente.
Department of the Army to initiate separation of COVID-19 vaccination order refusers
— U.S. Army (@USArmy) February 2, 2022
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"Departamento del Ejército iniciará separación de personas que rechacen orden de vacunación contra COVID-19".
La orden es para los soldados regulares del ejército, los de reserva que sirven en servicio activo del Título 10 y los cadetes.
Adicional a ello, quienes sean separados por este motivo no serán elegibles para el pago de separación involuntaria y pueden estar sujetos a la recuperación de cualquier pago especial o de incentivo no devengado.
La orden establece como única excepción a los soldados que completarán su separación, retiro o licencia de transición antes del 1 de julio de 2022, a los cuales se les permitirá completar sus separaciones o retiros.
Cabe mencionar que los soldados no vacunados que hayan solicitado una exención médica o adaptaciones religiosas, tendrán siete días para comenzar su esquema de vacunación o iniciar una apelación, en el caso de esta última, si es negativa deberá separarse del servicio militar inmediatamente.
Hasta el momento ningún elemento ha sido separado por no estar vacunados, pero se han relevado de su cargo a seis líderes, incluidos dos comandantes de batallón, y se han emitido 3073 reprimendas a soldados que han rechazado la vacuna contra la COVID-19.