Este jueves, en San Petersburgo, tuvo lugar la segunda edición de la cumbre Rusia-África, presidida por Vladimir Putin. Como se había anticipado, Putin confirmó su compromiso de donar cereales a los países más necesitados del continente africano. La cantidad de cereales donados variará entre 150 mil y 300 mil toneladas, sin alcanzar el medio millón de toneladas que se había mencionado previamente en caso de que el acuerdo de cereales, mediado por Turquía y las Naciones Unidas, no se extendiera. Este acuerdo se suspendió hace diez días.
Aunque no se especificó la cantidad exacta de la donación en el anuncio realizado por el presidente Putin, él afirmó que en los próximos 3 ó 4 meses estarán listos para suministrar a Burkina Faso, Zimbabue, Mali, Somalia, la República Centroafricana y Eritrea entre 25 mil y 50 mil toneladas de cereales de forma gratuita.
Es importante mencionar que recientemente se perdieron 60 mil toneladas de granos destinados a China en un bombardeo ruso en la zona portuaria de Odesa. China está intensificando sus esfuerzos para aumentar su influencia en África, donde compite con Estados Unidos, los países europeos y Rusia.
Putin resaltó la relevancia del suministro constante de alimentos para los países africanos, ya que esto es fundamental para su desarrollo socioeconómico y la estabilidad política en el continente. Afirmó que Rusia continuará prestando especial atención al suministro de trigo, cebada, maíz y otros cultivos a los países africanos.
El presidente ruso lamentó que la iniciativa alimentaria del mar Negro se haya suspendido debido al incumplimiento de las demandas de Moscú. No obstante, considerando que Rusia tendrá una cosecha récord este año, está en condiciones de reemplazar el grano ucraniano tanto en suministros comerciales como en ayuda humanitaria gratuita para los países más necesitados.
No obstante, aún queda por resolver la parte logística del transporte de los cereales rusos a países lejanos como los africanos. A pesar de que las sanciones occidentales no incluyen cereales o fertilizantes rusos, el transporte se enfrenta a desafíos debido a la prohibición de que los cargueros rusos entren en puertos europeos y la negativa de las aseguradoras a atender a clientes rusos, entre otros obstáculos. El Kremlin busca resolver esta situación al retirarse del pacto de los cereales de Estambul.