El presidente de China, Xi Jinping, y su homólogo sirio, Bashar al Asad, anunciaron este viernes una asociación estratégica entre sus naciones, marcando un logro en las relaciones bilaterales y brindando apoyo crucial al gobierno sirio en su búsqueda de fondos para la reconstrucción.
La histórica reunión tuvo lugar en Hangzhou, China, donde Bashar al Asad realizó su primer viaje oficial en casi dos décadas. Su misión abarcó dos objetivos principales: obtener apoyo financiero para la recuperación de Siria, asolada por un conflicto sangriento desde 2011, y mejorar la imagen internacional de su gobierno, que estuvo aislado durante un tiempo y enfrentó acusaciones de atrocidades durante la guerra.
El presidente Xi Jinping recibió cordialmente a Al Asad y anunció la creación de la "asociación estratégica China-Siria", destacando su importancia en la historia de las relaciones bilaterales. Xi subrayó la voluntad de China de seguir colaborando con Siria en un contexto internacional marcado por la inestabilidad e incertidumbre.
"La amistad entre ambos países se ha fortalecido con el tiempo", anadió Xi.
Es relevante destacar que Siria ha sido uno de los pocos destinos fuera de Oriente Medio que el presidente Asad ha visitado desde el inicio de la guerra civil en 2011, que posteriormente se convirtió en un conflicto de alcance regional.
Este conflicto devastador ha cobrado la vida de más de medio millón de personas, forzando a millones a desplazarse y causando la destrucción de una gran parte de la infraestructura y la industria local, incluyendo el sector petrolero. Además, el gobierno sirio enfrenta sanciones internacionales que han dificultado su recuperación económica.
Activismo chino en Oriente Medio
China juega un papel cada vez más preponderante en Oriente Medio, como quedó patente con su mediación en el acercamiento diplomático a principios de año entre Irán --aliado de Siria-- y Arabia Saudita, rivales históricos.
Pekín forma parte además de los aliados de Asad, y regularmente se ha abstenido en la votación de resoluciones contra Damasco en el Consejo de Seguridad de la ONU.
"Le doy las gracias a usted y al gobierno chino por todo lo que han hecho para mantenerse al lado del pueblo sirio", declaró Asad en su encuentro este viernes con Xi, citado por la agencia oficial siria Sana.
"Esta visita es extremadamente importante por su momento y sus circunstancias, porque se está constituyendo un mundo multipolar que va a restaurar el equilibrio y la estabilidad en el mundo", añadió el mandatario sirio.
El régimen de Damasco empezó este 2023 un acercamiento con numerosos países árabes después de años de aislamiento por la guerra.
Esta normalización de las relaciones quedó refrendada en mayo con el regreso de Damasco al seno de la Liga Árabe y la participación del presidente sirio en una cumbre en Arabia Saudita.
China, muy activa en una región históricamente estratégica para Estados Unidos, está promoviendo en Oriente Medio su ambicioso proyecto de las nuevas Rutas de la Seda, consistente en inversiones masivas en infraestructuras para mejorar las conexiones comerciales entre Asia, Europa y África.
Siria se unió al proyecto en enero de 2022 y espera recibir importantes inversiones.
En un comunicado sobre la "colaboración estratégica", citado el viernes por la agencia siria Sana al margen de la reunión entre ambos mandatarios, Pekín y Damasco aseguran que "refuerzan la cooperación amistosa en varios ámbitos".
"La parte china seguirá aportando toda la ayuda posible a Siria y apoyando los esfuerzos sirios en la reconstrucción", añade el comunicado.