El presidente ruso, Vladímir Putin, ha expresado sus preocupaciones sobre la situación actual en Oriente Medio y ha calificado la violencia entre israelíes y palestinos como un ejemplo claro del "fracaso" de la política de Estados Unidos en la región.
“La crisis ucraniana continúa y, lamentablemente, vemos un brusco agravamiento de la situación en Oriente Medio. Creo que muchos coincidirán conmigo de que este es un claro ejemplo del fracaso de la política estadounidense en Oriente Medio”, dijo Putin al comienzo de la reunión en el Kremlin con el primer ministro de Irak, Mohamed Shia al Sudani.
En sus palabras, Putin acusó a Washington de intentar "monopolizar el arreglo" y de no buscar compromisos aceptables para ambas partes, sino de imponer su propia visión, ejerciendo presión sobre ambas partes involucradas en el conflicto.
“Justo a los dos, unas veces a uno, otra veces al otro; pero cada vez sin tener en cuenta los intereses del pueblo palestino. Me refiero, principalmente, a la necesidad de cumplir las decisiones del Consejo de Seguridad de la ONU sobre la creación de un Estado palestino soberano e independiente”, agregó.
El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, señaló que Rusia está dispuesta a contribuir a la búsqueda de una solución al conflicto palestino-israelí, a pesar de que los esfuerzos anteriores en este sentido han tenido resultados limitados. "Estamos dispuestos a seguir trabajando en la búsqueda de soluciones", destacó.
Peskov también resaltó los lazos históricos de Rusia con los palestinos, aunque subrayó que Rusia mantiene relaciones cercanas con Israel, especialmente debido a la gran comunidad de rusos que reside en ese país.
Además, el embajador de Rusia en Israel, Anatoli Víktorov, confirmó la trágica noticia de la muerte de un segundo ciudadano ruso desde el inicio de la violencia, que comenzó con el ataque masivo del grupo islamista Hamás el pasado sábado. Según las autoridades israelíes, cuatro ciudadanos rusos también figuran en la lista de desaparecidos.