El líder del grupo chií libanés Hezbolá, Hasán Nasrala, hizo una fuerte declaración hoy, afirmando que Estados Unidos es el "completo responsable" de la escalada de violencia en Gaza, considerando a Israel como "simplemente un instrumento" en este conflicto.
En un discurso televisado, su primera comparecencia pública desde el inicio de la escalada de violencia en la Franja de Gaza y en el sur de Líbano, la principal autoridad de Hezbolá subrayó que es “Estados Unidos es el que impide un alto el fuego” y el que evita también “que el enemigo sea condenado internacionalmente”.
"Estados Unidos debe rendir cuentas por sus crímenes, ya que ha sido el principal responsable de todas las masacres del siglo pasado y del siglo actual", afirmó Nasrala.
Además, el líder de Hezbolá emitió una amenaza hacia Israel, declarando que el grupo militante libanés está preparado para "todas las posibilidades". Esto sugiere que los ataques diarios del grupo terrorista contra territorio israelí y las maniobras de defensa de Israel podrían desencadenar una guerra a gran escala.
Nasrala también habló sobre los ataques de Hamas contra Israel y los describió como "una nueva fase de lucha contra este enemigo". Tanto Hamas como Hezbolá están respaldados por Irán y designados como organizaciones terroristas por Estados Unidos.
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En su primer discurso desde el inicio de los ataques, Nasrala dejó claro que la escalada del conflicto en la frontera libanesa dependerá de los acontecimientos en Gaza, donde tiene su sede Hamas, y del comportamiento de Israel hacia el Líbano.
“Seré transparente y honesto y deliberadamente ambiguo al decir que todas las posibilidades están abiertas en nuestro frente libanés”, dijo Nasrallah. “Tenemos que estar preparados y presentes para todas las probabilidades futuras”.
La preocupación aumenta en la región, ya que el ejército israelí intensifica su operación terrestre en Gaza para combatir a Hamas, y existe el temor de que se abra un nuevo frente en el norte con Hezbolá. Este grupo ya está involucrado en enfrentamientos con Israel casi a diario, resultando en bajas de ambos lados.
Hezbolá, una de las milicias más poderosas de Oriente Medio, ha declarado tener 100 mil combatientes y un arsenal de misiles capaces de alcanzar todo Israel. Sus combatientes han participado en extensos combates en Siria en los últimos años, apoyando al presidente Bashar al-Assad contra las fuerzas rebeldes.
La última guerra entre Hezbolá e Israel en 2006 dejó un saldo de más de mil muertos en el Líbano y más de 100 en Israel, además de provocar desplazamientos masivos y daños a la infraestructura. En aquel momento, el grupo se atribuyó la victoria y disfrutó de apoyo popular en el mundo árabe.
Por último, Irán ha advertido que se abrirán nuevos frentes contra Estados Unidos si continúa su apoyo inequívoco a Israel.
