En un comunicado emitido hoy, el presidente palestino, Mahmoud Abbas, condenó enérgicamente la guerra genocida y la devastación que el pueblo palestino ha sufrido a manos de lo que él describió como la maquinaria asesina israelí. Estas declaraciones coinciden con el próximo décimo noveno aniversario de la muerte del exlíder palestino Yasser Arafat.
Abbas señaló que la agresión israelí muestra un total desprecio por el derecho internacional humanitario, y destacó la necesidad urgente de poner fin a los bombardeos de Tel Aviv en la Franja de Gaza y de proporcionar ayuda humanitaria a la población civil.
Además, planteó la pregunta de cómo el mundo puede quedarse en silencio frente a la devastación que ha dejado a más de 40,000 palestinos heridos o muertos, la mayoría de ellos niños y mujeres.
¿Cómo puede el mundo permanecer en silencio ante la matanza y lesiones de más de 40 mil palestinos, la mayoría de ellos niños y mujeres?
El presidente palestino también expresó su preocupación por la destrucción de infraestructuras y decenas de miles de hogares en Gaza y otros territorios debido a los ataques de las fuerzas de seguridad israelíes desde el pasado 7 de octubre.
Abbas subrayó que no tolerarán la reocupación de Gaza ni la anexión de ninguna de sus partes por parte de Tel Aviv y enfatizó que la paz y la seguridad en la región solo se lograrán cuando se ponga fin a la ocupación israelí de los territorios palestinos, incluida Jerusalén Oriental, sobre la base de las fronteras de 1967.
Estas declaraciones se producen en un momento en que el número de civiles muertos en Gaza como resultado de los ataques militares israelíes supera los 10,800, y más de 24,000 personas han resultado heridas, según informes de fuentes médicas locales.
Además, diversas organizaciones políticas, incluido el Frente Popular para la Liberación de Palestina, han acusado al gobierno de Estados Unidos de brindar un apoyo total a los crímenes israelíes en los territorios ocupados, especialmente en el área de Gaza.