El huracán Beryl, ahora de categoría 5, establece el inicio de una temporada de huracanes extremadamente peligrosa, según la Organización Meteorológica Mundial (OMM).
Beryl devastó Granada y San Vicente y las Granadinas, dejando sin electricidad a muchos hogares. Se prevé que impacte Jamaica el miércoles y las Islas Caimán al final de la semana.
“Es el huracán de categoría 5 más precoz registrado en la cuenca atlántica, caribeña y centroamericana", informó Clare Nullis, portavoz de la OMM, en Ginebra.
Añadió: “Establece un precedente para lo que nos tememos va a ser una temporada de huracanes muy activa, muy peligrosa, que afectará a toda la cuenca”.
Un huracán de categoría 5, según la escala de Saffir-Simpson, con vientos de 252 kilómetros por hora (157 millas por hora) o más, puede causar daños catastróficos, destruyendo viviendas e infraestructuras.
“Debemos tener en cuenta que sólo hace falta que un huracán toque tierra para que retrocedan décadas de desarrollo”, dijo Nullis.
“Tememos lo que está ocurriendo con el huracán Beryl, que ha golpeado islas muy, muy pequeñas del Caribe que no están acostumbradas a este tamaño de huracán”, añadió.
Anne-Claire Fontaine, científica del Programa de Ciclones Tropicales de la OMM, explicó que el desarrollo temprano de Beryl está relacionado con las temperaturas más cálidas del océano.
“La Región Principal de Desarrollo (MDR), el lugar del océano donde se desarrollan los huracanes (…) registra las temperaturas más cálidas de la historia”.
