El Ministerio de Defensa de Rusia negó hoy haber atacado intencionalmente objetivos civiles en Ucrania durante el bombardeo masivo de esta mañana contra fábricas de la industria militar y bases aéreas ucranianas.
“Las declaraciones de representantes del régimen de Kiev sobre el supuestamente deliberado ataque de misiles de Rusia contra objetivos civiles no se corresponden en nada con la realidad”, señaló la dependencia castrense en un comunicado.
El Ministerio de Defensa aseguró que “las numerosas fotos y vídeos publicados desde Kiev confirman claramente que los daños fueron causados por la caída de un misil antiaéreo ucraniano lanzado dentro de la ciudad”.
El mando ruso denunció que “estas reacciones del régimen de Kiev siempre ocurren antes de cada nueva cumbre de sus patrocinadores de la OTAN”, refiriéndose a la reunión de la Alianza que comenzará mañana en Washington.
“El objetivo de este tipo de provocaciones es garantizar el financiamiento del régimen de Kiev y continuar la guerra hasta el último ucraniano”, añadió.
Defendieron que, en la mañana, “en respuesta a los intentos de Kiev de dañar objetivos energéticos y económicos rusos, las Fuerzas Armadas de Rusia lanzaron un ataque masivo con armas de alta precisión y largo alcance contra objetivos de la industria militar de Ucrania y las bases aéreas del Ejército ucraniano”.
“Los objetivos fueron alcanzados y destruidos”, añadió Defensa.
Las autoridades ucranianas denunciaron hoy la muerte de al menos 21 civiles, diez en Kiev, otros diez en Krivói Rog, en el centro-oeste de Ucrania, y otro en la región de Dnipró, como resultado del lanzamiento de más de 40 misiles por parte de Rusia.