La coalición gobernante en Japón, liderada por el Partido Liberal Democrático (PLD) y su aliado Komeito, sufrió una significativa pérdida de escaños en las elecciones generales del domingo.
Los dos partidos lograron 209 de los 465 escaños en la Cámara Baja del Parlamento, con 20 escaños aún por definir, según la cadena NHK.
Esta cifra está lejos de los 279 escaños previos y se encuentra por debajo de los 233 necesarios para mantener la mayoría, marcando su peor desempeño electoral desde 2009, cuando la coalición perdió brevemente el poder.
El gran ganador de estas elecciones fue el Partido Constitucional Democrático de Japón (CDPJ), el principal grupo de oposición, que incrementó su representación a 143 escaños desde los 98 que tenía anteriormente.
“Estas elecciones han sido muy duras para nosotros”, admitió con tono serio el primer ministro Shigeru Ishiba, en una entrevista con TV Tokio, mientras aún queda pendiente el 40% de los resultados.
La pérdida de la mayoría parlamentaria podría llevar al PLD o al CDPJ a negociar con otros partidos para asegurar el gobierno, un escenario que podría generar inestabilidad en un contexto de dificultades económicas y tensiones de seguridad en Asia Oriental.
Yoshihiko Noda, líder del CDPJ, expresó que trabajarán con otras agrupaciones opositoras para impulsar un cambio de gobierno, asegurando que “este no es el final, sino el principio”.
Ishiba indicó que esperará los resultados definitivos, previstos para las primeras horas del lunes, antes de considerar alianzas o pactos de poder.
El primer ministro convocó estas elecciones poco después de asumir el liderazgo del PLD, buscando legitimidad en medio de una creciente crisis por el costo de vida y tras un escándalo de donaciones no declaradas que empañó la administración de su predecesor, Fumio Kishida.
Pequeños partidos como el Partido Democrático para el Pueblo (PDP) y el Partido de la Innovación de Japón, con 27 y 35 escaños respectivamente, podrían desempeñar un papel crucial en la futura configuración del gobierno, aunque sus posturas políticas difieren de las del PLD.