Un tribunal de París ha declarado culpable a Marine Le Pen, líder de la Agrupación Nacional (AN), y a ocho eurodiputados de su partido por malversación de fondos de la Unión Europea.
El caso está relacionado con un esquema de falsos asistentes parlamentarios que desvió 2,9 millones de euros, lo que implica la inhabilitación inmediata de Le Pen para ocupar cargos públicos. La medida afecta también a todos los cargos electos involucrados en el caso.
La presidenta del tribunal, Bénédicte de Perthuis, defendió que la inhabilitación era “necesaria” y debe aplicarse de inmediato, lo que frustra las aspiraciones políticas de Le Pen para las elecciones de 2027. La dirigente ultraderechista abandonó la sala antes de finalizar la lectura de su sentencia.
Además, los 12 asistentes parlamentarios que recibieron pagos a través de “contratos ficticios” también fueron declarados culpables.
La jueza detalló que la malversación ocurrió durante más de once años y que el objetivo era “reducir la carga” del partido. De Perthuis subrayó que todos los implicados trabajaban para el partido, pero no realizaban ninguna labor parlamentaria.
Asimismo, la jueza aclaró que el juicio no tenía motivaciones políticas, sino que se centró en verificar si los contratos se cumplían.
En su sentencia, destacó que el esquema fue implementado por Le Pen con “autoridad y determinación” tras la muerte de su padre, Jean-Marie Le Pen, y que formaba parte de un sistema establecido dentro del partido.