El pasado 9 de febrero venció el plazo de 60 días fijado por el juez especializado para el cierre de la investigación en torno a las conductas antisociales presuntamente cometidas por el menor, quien -según sus propias declaraciones a medios de comunicación- habría participado en cuatro homicidios de miembros de bandas rivales del Cártel del Pacífico Sur.
La Ley de Justicia para Adolescentes del Estado de Morelos establece que al cierre de la investigación debe llevarse la audiencia intermedia, durante la cual las partes ofrecen las pruebas de cargo y descargo y el juez especializado determina la aceptación o no de cada una de ellas para posteriormente fijar la fecha del juicio oral.
De acuerdo con la Procuraduría General de Justicia, en la audiencia la Fiscalía Especializada en Adolescentes aportó diversas pruebas y ratificó ante la autoridad judicial las acusaciones contra Edgar, de 14 años de edad, por cuatro conductas antisociales: delitos contra la salud en su modalidad de transportación del estupefaciente denominado cocaína, portación de arma de fuego de uso exclusivo del Ejército, Armada y Fuerza Aérea, secuestro y homicidio doloso.
Además, reiteró la solicitud al juez del Tribunal Unitario de Justicia para Adolescentes (TUJA) que conoce la causa penal de imponer a “El Ponchis” una sanción de 4 millones 456 mil pesos como reparación del daño para los familiares de las víctimas de secuestro y homicidio, y la pena máxima que, por la edad de Edgar, sería de tres años de internamiento.
El fiscal especializado de la PGJ, José Manuel Serrano Salmerón, dijo que durante la audiencia el juez de la causa aceptó los 49 testimoniales, 25 periciales y 28 medios de prueba, que incluyen testimonios de los familiares de las víctimas y de elementos del Ejército Mexicano.
Por su parte, el juez especializado del TUJA, Armando Prieto Limón, dijo que al concluir la audiencia intermedia se dictó el auto de apertura de juicio oral, y en un plazo de 15 a 60 días el juzgador que conocerá del juicio deberá fijar fecha para la audiencia de debate, para posteriormente dictar sentencia.
Cabe destacar que a pesar de que Edgar es ciudadano estadounidense, no ha recibido asistencia legal de la embajada norteamericana y el caso está a cargo de dos defensores públicos del estado de Morelos.
A principios de noviembre de 2010, la historia de “El Ponchis” corrió como pólvora en medios de comunicación mexicanos e internacionales tras la detención de una célula de seis supuestos sicarios del Cártel de Pacífico Sur en el municipio de Jiutepec.
Y es que el 29 de octubre de 2010, cuando los elementos del Ejército Mexicano comenzaron el cateo de la casa de seguridad donde se encontraban los presuntos sicarios, vieron salir al menor y lo dejaron ir; sin embargo, en sus declaraciones los detenidos presuntamente aceptaron su responsabilidad en varios homicidios y señalaron al niño como el degollador de las víctimas y colaborador del supuesto líder del CPS en Morelos, Julio Radilla alias “El Negro”.
La noche del 3 de diciembre, el Ejército Mexicano detuvo a “El Ponchis” presuntamente en posesión de armas y narcóticos en el Aeropuerto de Cuernavaca cuando pretendía tomar un vuelo con destino a Tijuana (para cruzar la frontera hacia San Diego), junto con sus dos hermanas también supuestamente involucradas en actividades del CPS como encargadas de tirar los cadáveres.
Durante la presentación que el Ejército Mexicano hizo del menor ante los medios de comunicación, “El Ponchis” dijo haber sido secuestrado y obligado bajo amenaza de muerte por Jesús Radilla, alias “El Negro”, jefe del Cártel del Pacífico Sur (CPS), a formar parte de ese grupo criminal.
Detalló que cursaba el primer año de secundaria cuando ingresó a las filas del CPS, dejó su hogar y decidió vivir en las casas de seguridad de los sicarios.
El 5 de diciembre, un juez especializado determinó dictar prisión preventiva al adolescente, quien está recluido en el Centro Especializado en Medidas Privativas de la Libertad para Adolescentes del Estado de Morelos.