La motocicleta Yamaha color negro en la que viajaban los ahora occisos no tenía placas de circulación y presentaba huellas de derrape, cerca de ella se hallaron seis casquillos percutidos calibre .9 milímetros y tres ojivas deformadas.

Después de realizar las primeras averiguaciones en relación al hecho violento del domingo, la PGJ del estado informó que dos de los tres muchachos asesinados ese día por la tarde eran menores de edad ya que tenían 17 años.

El primero es Raúl “X”, con residencia en la privada 20 de Noviembre de la colonia Tejalpa en el municipio Jiutepec, Morelos, quien fue encontrado sin vida en la azotea del domicilio marcado con el número 15 ubicado en la calle 16 de Septiembre, donde se hallaron siete cartuchos calibre .9 milímetros y dos proyectiles deformados.

El segundo es Winston “N”, cuyo cuerpo cayó abatido en la calle Tepoztlán frente a los números 223 y 25, esquina con cerrada 24 de Febrero, que presentó raspones y diversas lesiones producidas arma de fuego.

Asimismo, se encontró que Winston tenía colgada en su hombro una bolsa blanca conocida como mariconera, la cual contenía marihuana y una cartera negra.

De igual forma se halló en el mismo lugar anterior, a 17 metros de Winston, el cadáver de Eliud Alejandro Rosel Aceves, de 19 años, que tenía lesiones causadas por proyectil de arma de fuego en el abdomen, pecho y cráneo.

Estos dos últimos occisos tenían su domicilio en la calle Felipe Neri de la colonia Antonio Barona de Cuernavaca.

Eliud Rosel fue identificado por su madre que comentó que su hijo era ayudante de albañil y desconocía el porqué lo privaron de la vida.

Igualmente Winston fue reconocido por su mamá, quien manifestó que su hijo abandonó su hogar materno desde 2010, por lo que desconoce su domicilio y su ocupación actual, y desde hace dos meses no mantenía comunicación con él.

Además de esto, Winston cuenta con un registro criminal dentro de la carpeta de investigación FRV01/554/2012 por el delito de robo de vehículo.

Finalmente, la identificación de Raúl la realizó su suegro que refirió que su yerno se dedicaba a colocar pisos y que le avisaron que lo habían matado.

Esta misma persona informó que a Winston lo conocía por el apodo del “Changuito”, quien siempre circulaba en una motocicleta negra y anteriormente vendía tortillas en la colonia Tejalpa.