Bueno, lejano se ve el segundo lugar para la panista. Los escenarios probables desfavorecen el proyecto del titular del Ejecutivo federal, de ahí que consideremos que habrá misiles de alto impacto, sólo hay que ver hacia qué dirección, porque como acertadamente lo dijo ayer en su columna Jorge Zepeda Paterson: Felipe Calderón hará lo posible por entregarle la banda y el mando al que menos le parta el hígado.
Depende del comportamiento electoral para determinar si lo hacen ahora o hasta pasado el 1 de julio. Son todo tipo de asuntos nacionales, otros regionales, que hoy o mañana tendrían impacto en este nivel y, seguro, los temas Yarrington—Eugenio Hernández van para más. El tema es cómo los manejan y el daño que provoquen.
¿Y aquí, qué?
Bueno, es un hecho que las posiciones si bien pueden estar en la misma posición de hace dos meses, las ventajas se reducen entre el Partido Revolucionario Institucional (PRI) y Partido de la Revolución Democrática (PRD)-Movimiento Regeneración Nacional (Morena) y anexas. Hemos dejado aquí con claridad cuál es la relación entre el candidato Amado Orihuela y el presidente de su partido, Manuel Martínez Garrigós. Lo menos que se tienen es respeto y sus acciones y sobre todo reacciones son viscerales y poco afortunadas. Si llegan a perder los del PRI, habrá que hacer un manual de cómo “Acabar con un proyecto ganador en unas cuantas semanas”. Porque hace un mes los escenarios que hoy describen medios y empresas parecían prácticamente improbables –decir imposible suena extremo--. Hoy todo puede suceder… hasta que el PRI gane.
Como justificación, les compartimos a los lectores lo impresionante de los comunicados que la oficina de Graco hace llegar a los periodistas, cuando menos 15 al día. Los encontramos a toda hora, día y noche. Son intensos. Por el lado del PRI, la teoría que es un hecho, las estructuras, no han sido aceitadas desde el momento preciso y si lo empiezan a hacer –o anteayer, el viernes o el miércoles anterior—vamos a vivir un cierre de foto en la meta final entre Graco y Amado. Si en el Comité Ejecutivo Nacional (CEN) del PRI tienen la confianza absoluta que su candidato es capaz de regresar a los números de inicio, van a venir con todo. Si ven cercanía lo van a dejar, porque Morelos para el triunfo de Enrique Peña Nieto no incide. Tampoco para una eventual derrota.
Y ya a estos trotes y con la fotografía de cada día, en el CEN del PRI, el de las diferencias Osorio Chong—Luis Videgaray, el de las pujas entre Pedro Joaquín con el mismo Osorio, lo único que les interesa es que gane su candidato a la presidencia y que se acomoden como quedaron sus cercanos. Lo demás, en serio, les vale gorro. Imposible que el trato que recibe el candidato en Jalisco, Jorge Aristóteles Sandoval sea el que le dan a Amado Orihuela. Allá el número de votos sí importa y la ventaja del ex presidente de Guadalajara parece definitiva.
No se trata de tener o no la razón, de abrir espacios en la casa de campaña o en su partido, ha dejado pasar meses, semanas, días y horas vitales en sus propios zafarranchos de combate, mientras enfrente el en apariencia menos indicado (pero perfectamente apoyado económica y políticamente, se habla de 110 millones de pesos nada más del gobierno de don Marcelo en el Distrito Federal) Graco Ramírez Garrido Abreu, transita cuesta arriba. Ya no es una ilusión, ya lo sintieron aquí en el cuarto de Amado, en el abandonado –física, moral y políticamente-- edificio del PRI Morelos y las luces rojas están prendidas permanentemente.
Ya vimos que Amado se fue con los suyos, a las regiones, a buscar crecer. Y Graco sigue en lo suyo. Lo vamos a repetir: la historia electoral indica que candidato que alcanza, gana. Los números en cada cuartel son maquillados. Adrián en el PAN no aparece con ninguna posibilidad, ni siquiera ha invertido a la campaña para tapar “el ojo al macho”. Es obvio su desinterés… Vamos a respetar al muchacho Julio Yáñez que bajo tanta palabra esconde su única pretensión: la conservación del registro local para llevársela tranquilo con los suyos, obviamente con las prerrogativas correspondientes. El asunto está arriba, donde Amado Orihuela según su gente cercana, sigue manteniendo una ventaja considerable, pero versiones del CEN del PRI, lo colocaban pegadito a Graco, empatados. Y los del equipo del polémico y listo Graco, lo sientan virtualmente en el sillón de la principal oficina del gobierno de Morelos. ¿A quién creerle? Mentiras por acá, medias verdades por allá, especulaciones más allá, en tanto la realidad se aproxima y cada vez más: son tres semanas.
Otra vez Raúl Sánchez y de nuevo Graco
Mi querido Javier: A estas alturas de la actual, desastrosa administración estatal, al conglomerado Morelense créeme que le vale mauser a quien pongan de procurador. Finalmente la justicia pronta y expedita es una gran falacia. Por el noticiero de Ricardo Rocha nos despertamos los Morelenses aterrados un día y a la otra semana también, por los acontecimientos que se dan en el terruño. Como migrantes morelenses sinceramente desearíamos que la situación cambie, a veces hasta parece de película todo lo que sucede, pero más nos pondrá a temblar que un refugiado tabasqueño nos llegase a gobernar, eso sería lo más inaudito que Morelos viviera, que mañana no nos vayamos a despertar con esa pesadilla. ¡Pobre de mi Siberia Morelense, tan lejos de los migrantes y tan cerca del mayor peligro para Morelos!
MORELENSES, DE USTEDES DEPENDE VOLAR ALTO O ARRASTRARSE Y SI MAÑANA NOS PISOTEAN, NO PROTESTEMOS. GRACO ES UN PELIGRO PARA MORELOS.
RAÚL E. SANCHEZ OCAMPO DESDE MINNEAPOLIS.