De acuerdo con fuentes de la Policía Ministerial, la madrugada de este viernes los elementos de esta corporación realizaron varios cateos en relación al homicidio de Rogelio Peñaranda, de entre los cuales uno hecho en el domicilio Mato Groso número tres situado dentro del fraccionamiento Burgos arrojó evidencia de que en ese lugar fue asesinado el agente del Ministerio Público.
En dicha residencia, los policías ministeriales encontraron huellas de sangre, prendas de vestir y costales de yute con que fue envuelta la víctima una vez extinta; además de ahí fue sacada la colcha con que fue cubierto el cuerpo sin vida de Rogelio Peñaranda.
Así mismo, entrevistaron al dueño de la morada, el cual declaró que se la había rentado a un conocido suyo, el cual es el principal sospechoso de este crimen.
Por otra parte, aún no se ha definido el móvil del asesinato; sin embargo, en cuanto al desarrollo de los hechos, se tiene una hipótesis derivada del análisis del registro de llamadas que guarda el dispositivo de telefonía móvil perteneciente al ahora fallecido.
Al parecer, Rogelio Peñaranda recibió una llamada cerca de la una de la mañana del lunes, por la cual salió del domicilio en que se encontraba en ese momento, sin que nadie de los que ahí se hallaban se diera cuenta, y una vez afuera fue sometido y luego llevado contra su voluntad a la vivienda antes señalada, donde luego de ser golpeado severamente fue degollado.
Tras todo esto, como se recordará, el cuerpo sin vida de Rogelio Peñaranda fue descubierto horas después, alrededor de las 7:40 horas, dentro del mismo fraccionamiento Burgos, en un terreno baldío del retorno Luxemburgo.