De acuerdo a información recabada por La Unión de Morelos, las víctimas fueron objeto de una supuesta revisión el pasado 20 de septiembre cerca de las 8:30 de la mañana.
Ese día los uniformados entraron al área de dormitorios de las jovencitas y les informaron que les realizarían una investigación, por lo que las llevaron a otra área en el interior del penal.
Posteriormente los policías acreditables las insultaron y obligaron a que estas se desnudaran para realizarles las revisiones.
En seguida los oficiales las video grabaron con teléfonos celulares y a una de ellas la empujaron con tal fuerza que la misma cayó al piso y se golpeó. Incluso, a otra de las menores la tocaron en diferentes ocasiones; a través de cartas anónimas las víctimas denunciaron este hecho.
En una de las cartas emitidas por una de las muchachitas se relata que “surgió una revisión en nuestra área, interviniendo los policías acreditables con un abuso de poder, faltándonos al respeto de una manera grosera”.
El texto continúa diciendo que “al revisarnos corporalmente abusaron de una manera agresiva en contra de nuestra persona, manoseándonos nuestras partes íntimas y diciéndonos groserías”.
Finalmente los uniformados regresaron a las internas a sus dormitorios y las amenazaron con hacerle daño a sus familiares si decían lo que había ocurrido.