Semanas antes la Fiscalía Contra el Robo de Vehículos solicitó una pena de diez años de prisión para los imputados, tras considerar que éstos deberían tener la pena máxima, pues para cometer el robo sometieron a su víctima con un cuchillo, el cual le pusieron en el cuello, aunque el chofer del taxi logró huir, al saltar del carro en movimiento.

Los defensores de los tres imputados coincidieron que la Fiscalía acreditó fehacientemente el hecho delictivo, pues en el automóvil los peritos encontraron huellas dactilares de dos de los imputados, pero además fueron detenidos cuando viajaban a bordo del carro en la colonia Santa Úrsula, al sur del municipio de Temixco.

Al iniciar la audiencia con expediente JC/125/2013, el juez de control Jorge Gamboa Olea preguntó si la defensa y la fiscalía habían logrado algún acuerdo para evitar el juicio oral y fue cuando la ministerio público Kris Eline Martínez afirmó que los detenidos aceptaron una condena mínima, a cambio de declararse culpables.

De hecho, el afectado fue citado en dos ocasiones para estar al tanto del acuerdo entre defensa y fiscalía, pues el Código Procesal Penal así lo exige, pero éste no acudió.

Sobre los hechos, se informó que sucedieron el 3 de febrero del año pasado, cuando tres hombres le solicitaron el servicio al trabajador del volante en la avenida Emiliano Zapata de la colonia Lázaro Cárdenas, en el municipio de Temixco, pero apenas subieron al automóvil, uno de los hombres le colocó un cuchillo al taxista en la garganta.

La víctima logró escapar y reportó lo sucedido a la Policía Municipal, pero tres horas después lo uniformados localizaron el automóvil con Jonathan Ismael Contreras, Nicolás Cruz Romualdo y Samuel Gregorio Martínez Castro a bordo del mismo. Incluso los hombres intentaron darse a la fuga, pero fueron alcanzados por los agentes policíacos.

La Fiscalía consideró que citando a comparecer a los agentes que realizaron la detención, quedaría plenamente acreditado que los detenidos sí estaban a bordo del automóvil e incluso éstos ya le habían quitado algunas de sus partes.

“Por nuestra parte, la Fiscalía, no hay objeción en irnos al abreviado, e incluso citamos al agraviado, pero éste al parecer no está interesado en darle seguimiento al juicio”, dijo la Fiscalía al ser cuestionada sobre si aceptaba irse al procedimiento abreviado.

Ahí mismo se informó que la pena de diez año que solicitó en audiencias anteriores la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJ), quedaba ya sin efecto, y que los hombres tendrán una sentencia de tres años. Es decir, tendrán que permanecer dos años más en la cárcel de Atlacholoaya.

Además cada uno de los detenidos tendrá que pagar una multa de 200 días de salario mínimo.

Finalmente, la defensa y sus clientes quedaron satisfechos con el ofrecimiento que ayer les planteó la PGJE, pero será hasta la próxima semana cuando se dé a conocer de manera formal el tiempo que estas tres personas tendrán que permanecer en la cárcel.