La defensa particular de los detenidos intentó desacreditar a toda costa los peritajes de la Fiscalía General del Estado (FGE), pues de ello dependía de que sus representados fueran vinculados a juicio por robo simple o calificado. En el Código Penal del Estado de Morelos se establece una sanción para el robo simple de hasta un año de prisión, mientras que el robo calificado, su pena máxima es de 10 años.
En el expediente judicial JC/376/2014 se establece que Reyna Martínez Rodríguez, Aldo Sotelo Hernández, Arturo Oseguera Abarca y José Leonel Heredia Martínez, el pasado viernes 08 de mayo por la mañana, con engaños se introdujeron a una casa ubicada en la calle Tepoztlán de la colonia Lienzo del Charro, al norte de Cuernavaca.
Las primeras investigaciones refieren que eran cinco personas, pero una de ellas logró escapar, mientras que las otras cuatro fueron detenidas afuera del domicilio, gracias a que un vecino llamó a la Policía Preventiva.
Las víctimas indicaron que a punta de pistola los asaltantes los obligaron a decirles dónde guardaban dinero y de una recámara sustrajeron 12 mil pesos y 400 dólares, y de otra 25 mil pesos que estaban guardados en una alcancía. Además, los afectados indicaron que los individuos tomaron alhajas de oro y plata, y dos computadoras laptop. En total, la FGE valuó el robo en 52 mil pesos, pero no están incluidos un reloj de la marca Rolex y otro de la marca Cartier de mujer, cada uno de ellos con un costo de más de 25 mil pesos.
De acuerdo a un parte informativo, en la central policíaca se recibió una llamada anónima a las siete horas con 30 minutos, del día de los hechos, en la que se informaba que cinco personas estaban golpeando a los moradores de una casa, así que la policía llegó justo en el momento en que los presuntos ladrones salían de la casa con lo robado.
Tres de ellos corrieron, pero dos fueron detenidos y un tercero escapó, por lo que se presume que era quien llevaba consigo los relojes finos.
En la audiencia de ayer, la defensa alegó que los peritajes no eran reales, citando como ejemplo las computadoras laptop, pues a éstas el perito les fijó un precio sin precisar si las mismas funcionaban. El abogado pretendía con ello bajar la cuantía del robo, para evitar que en caso de que sus clientes fueran condenados, no recibieran una sentencia de hasta 10 años de prisión.
Sin embargo, la Fiscalía alegó que al margen de la cuantía había otras agravantes para considerar que el robo era calificado, pues este se cometió en el interior de una casa y para lograr su cometido, los culpables utilizaron armas de fuego. Incluso la Fiscalía afirmó que en el transcurso del juicio, los agraviados podrán acreditar con facturas o testigos que eran propietarios de los dos relojes mencionados, así que la cuantía del robo rebasaría los 100 mil pesos.
La juez de Control escuchó el debate y decretó un receso de 10 minutos para elaborar el auto, en el que determinó que había indicios de que los detenidos eran responsables del robo calificado, por lo que la pena que estas personas podrían alcanzar es de hasta 10 años.
Sobre la detención determinó que no era ilegal, pues la defensa alega que los imputados fueron detenidos dentro de la casa, pero la juez dijo que las evidencias presentadas señalan que los policías hicieron la captura en la calle.
Finalmente, la juez otorgó dos meses a la Fiscalía para culminar la investigación e iniciar el juicio oral correspondiente.