De acuerdo al relato de quienes acompañaban al occiso desde varia shoras antes, todos se encontraban en una celebración en un restaurante, hasta que decidieron cambiar de sitio.
Al llegar a la discoteca mencionada, los cadeneros les impidieron el paso, por lo que Figueroa González se puso a discutir con ellos, que se le fueron encima a golpes.
En un momento de la agresión, uno de los guardias sacó su pistola -los testigos afirman que todos llevaban un arma- y disparó un tiro de manera directa.
Sin embargo, quienes presenciaban los hechos pensaron que se trataba de bala de salva, porque Figueroa González seguía de pie. El atacante volvió a disparar y Sebastián tampoco cayó, pero fue en ese momento cuando todos reaccionar.
Uno de los acompañantes del agredido lo subió a una mcaioneta y se encaminó a la Cruz Roja, donde certificaron que el hijo del cantante había muerto.
Los testigos entrevistados por La Unión de Morelos aseguran que todo ocurrió a las tres de la mañana con diez minutos. La Procuraduría General de Justicia informó que ocurrieron a las dos y media de la mañana.
El segundo hijo del primer matrimonio de Joan Sebastian recibió los balazos en el cuello y en el tórax.
La familia se presentó al Servicio Médico Forense a reclamar el cuerpo, que fue recogido por personal de la funeraria Hispano Mexicana. Donde hasta este momento permanece. Aparentemente será llevado en las próximas horas a Los Angeles, en California, Estados Unidos, donde residía.
El occiso no se dedicaba a la vida artística, aunque ayudaba a su padre en sus negocios.