Con miras a las elecciones programadas para el 2 de junio del próximo año, el Instituto Nacional Electoral (INE) ha lanzado una propuesta que busca enriquecer el proceso democrático en México.
La Comisión Temporal de Debates, recién instalada, ha delineado un plan de trabajo para el período 2023-2024 que contempla la realización de tres debates entre los candidatos a la Presidencia de la República.
Este proyecto busca asegurar una "moderación activa" en los debates, donde se privilegie la imparcialidad y se evite cualquier tipo de confrontación entre los aspirantes presidenciales. Según el documento aprobado por la comisión, su misión es "propiciar respuestas útiles a la ciudadanía" en lugar de exponer o confrontar a los candidatos.
Es importante destacar que la realización de debates no es algo nuevo en México, ya que desde la reforma electoral de 1994, la autoridad electoral ha promovido este tipo de ejercicios como una representación simbólica de la deliberación democrática necesaria en cualquier sociedad democrática.
A pesar de la importancia de los debates, se ha planteado la necesidad de reducir los costos asociados con su organización. En las elecciones presidenciales de 2018, los tres debates realizados tuvieron un costo total de 56.4 millones de pesos. En respuesta a esto, consejeros y representantes partidistas han sugerido que se busquen formas de reducir gastos, incluso considerando la posibilidad de llevar a cabo los debates en las instalaciones del INE, utilizando recursos humanos y tecnológicos propios.
El debate sobre la cantidad de debates también ha surgido en este contexto. Mientras que la normatividad establece dos debates obligatorios, el PAN ha propuesto la realización de cuatro debates. En este sentido, se ha solicitado que se evalúen los recursos humanos y materiales del INE, y se ha sugerido que la Coordinación Nacional de Comunicación Social realice un informe al respecto.
Una cuestión relevante es que la Coordinación Nacional de Comunicación Social aún no tiene un titular ni un encargado de despacho. Para abordar esta situación, la consejera Carla Humphrey, presidenta de la comisión, ha designado al responsable de la administración de los tiempos de radio y televisión, adscrito a la dirección de Prerrogativas y Partidos Políticos, como encargado de esa función.
En cuanto a la audiencia, se ha señalado que en las elecciones de 2018, los debates alcanzaron niveles de audiencia sin precedentes y se introdujo la innovación de permitir la interacción de ciudadanos para formular preguntas a los contendientes.
Los miembros de la comisión temporal, que incluyen a los consejeros Martín Faz, Jorge Montaño y Claudia Zavala, junto con los representantes partidistas, tienen la responsabilidad de organizar los debates presidenciales, así como los debates para senadores y diputados.
Se espera que para finales de noviembre se definan el formato y los criterios para la elección de los moderadores que conducirán estos debates.