El presidente Andrés Manuel López Obrador respondió este viernes a las críticas que surgieron después de los saqueos en tiendas departamentales en Acapulco, tras el devastador paso del huracán Otis.
El mandatario descartó cualquier falta de presencia de la Guardia Nacional y el Ejército durante estos incidentes, alegando que se debió a la "situación de emergencia" que se vivía en la región.
En una declaración, López Obrador explicó que su principal preocupación en ese momento era la seguridad de las vidas humanas, más que los daños materiales. "Era una situación bastante complicada", reconoció, y señaló que la gente en Acapulco estaba llevando a cabo actos de saqueo debido a la urgencia de la situación.
Sin embargo, el presidente aseguró que ahora se han establecido retenes de la Guardia Nacional para mantener el orden y garantizar la seguridad en la zona afectada por el huracán Otis.
Te podría interesar: Reportan saqueos en Acapulco tras paso de Otis
López Obrador también explicó su decisión de viajar por tierra en lugar de por aire a la zona del desastre. Argumentó que esta elección le permitió conocer de primera mano la magnitud de la tragedia y hablar con las personas afectadas a lo largo del camino.
“Ve uno las casas derrumbadas; el agua inundando la carretera. Las avenidas de agua y lodo en las calles de los pueblos. Los carros tapados de lodo. Afectados por la caída de los árboles. Los postes de luz. La solidaridad de la gente", describió.
"Si llego en helicóptero, llego a la base naval. Ahí tomo el helicóptero y nada más desde arriba”, agregó.
El presidente López Obrador desestimó las críticas que sugieren un riesgo de estallido social, destacando la solidaridad de la gente de Guerrero y la buena comunicación con ellos. También mencionó que las críticas provienen de una campaña de desorden orquestada por sus adversarios políticos.
“Son opiniones de nuestros adversarios. “Estaba pasando el huracán todavía con afectaciones, pero ya diciendo no hay Fonden”, expuso.
En medio de la difícil situación causada por el huracán Otis, el presidente reafirmó su compromiso de ayudar a la población afectada y restaurar la normalidad en la región.