El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, anunció hoy el despliegue de 600 elementos del ejército y la Guardia Nacional en Texcatitlán, tras un violento enfrentamiento el fin de semana que dejó un saldo de 14 personas fallecidas. El conflicto se desató entre productores locales y miembros de la Familia Michoacana, sembrando preocupación en la comunidad.
“Muy lamentable, sí fue un enfrentamiento entre pobladores y al parecer una banda de la delincuencia por extorsión, por eso lamentablemente perdieron la vida 14 personas”, señaló.
Desde el primer día de la crisis, las fuerzas de seguridad se han mantenido en el área para resguardar a la población y restablecer la calma en la región. López Obrador aseguró que se está llevando a cabo una exhaustiva investigación y que se espera que mañana se proporcionen más detalles sobre el trágico incidente en el que perdieron la vida cuatro campesinos y 10 supuestos miembros del grupo delincuencial.
En su discurso, el presidente también destacó la evolución de los índices de homicidios en México, subrayando que la violencia se disparó en 2006 cuando se declaró la guerra al narcotráfico, lo que él llamó un "garrotazo a lo tonto del avispero".
Sin embargo, enfatizó que su administración está trabajando de manera constante para reducir la violencia y seguirá haciéndolo mediante políticas que atiendan las necesidades del pueblo y promuevan valores, así como el fortalecimiento de las familias, evitando el uso de medidas coercitivas.
López Obrador también mencionó la crisis de consumo de drogas en Estados Unidos, que cobra la vida de cien mil jóvenes al año, y destacó que México no enfrenta una crisis similar debido a la existencia de una sólida reserva de valores morales y familias unidas en la sociedad mexicana.