José Alfredo Cabrera Barrientos, candidato asesinado de la alianza PRI-PAN-PRD a la alcaldía de Coyuca de Benítez, Guerrero, fue sepultado este viernes. Familiares, amigos y pobladores de la localidad escoltaron el féretro desde la residencia del candidato hasta el cementerio en Las Lomas, su pueblo natal.
El miércoles 29 de mayo por la tarde, Cabrera Barrientos fue asesinado de dos disparos en la cabeza tras concluir su discurso de cierre de campaña. El ataque sucedió cuando descendía de la plataforma y sus escoltas neutralizaron al atacante.
Los informes de las autoridades de seguridad estatal indicaron que el homicidio se produjo aproximadamente a las 18:00 hora local, en el último día de las campañas electorales del 2 de junio.
En los materiales audiovisuales difundidos por los asistentes al evento, se ve al atacante detrás del candidato y, al descender del escenario, sacó un arma de fuego de calibre 9 milímetros y le disparó en la cabeza en dos ocasiones.
Los guardias de seguridad privados que custodiaban a Cabrera, respondieron con disparos al agresor, resultando en su muerte.
Los dos cuerpos quedaron en el sitio del mitin, que se llevaba a cabo en una cancha.
La consultora Integralia reportó este miércoles que las violencias políticas en México se han incrementado un 150.5%, sumando un total de 749 afectados en el actual ciclo electoral, en comparación con las elecciones intermedias de 2021.
De estas agresiones, 34 fueron asesinatos de candidatos y la cifra asciende a 231 si se incluyen funcionarios o exfuncionarios, políticos o expolíticos, y sus familias o víctimas incidentales.
El martes, el Gobierno mexicano reconoció el asesinato de 22 postulantes, de los que solo ocho eran candidatos oficiales.
