La presidenta Claudia Sheinbaum negó este jueves la posibilidad de reunirse con la presidenta de la Suprema Corte de Justicia de la Nación (SCJN), Norma Piña, para discutir las diferencias sobre la reforma que busca la elección por voto popular de los integrantes del Poder Judicial.

“No me voy a reunir con la Corte. La secretaria de Gobernación (Rosa Icela Rodríguez), en todo caso, tiene la atribución para reunirse con cualquier poder o resolver cualquier asunto que tenga que ver con la gobernabilidad de nuestro país”, respondió la mandataria a pregunta expresa en su conferencia mañanera en Palacio Nacional.

🚨 Rechaza #ClaudiaSheinbaum reunión con la #SCJN pic.twitter.com/BRtKbLJveb

— Manuel Lopez San Martin (@MLopezSanMartin) October 10, 2024

La SCJN, bajo el liderazgo de Piña, ha acordado revisar recursos judiciales en contra de la reforma constitucional promulgada el 15 de septiembre por el expresidente Andrés Manuel López Obrador (2018-2024), que establece elecciones para todos los jueces, magistrados y la SCJN a partir de 2025.

Sin embargo, Sheinbaum subrayó que no habrá “retroceso” en esta reforma, ya que, según ella, “la Suprema Corte no puede declarar inconstitucional una modificación a la Constitución que se decidió por mayoría calificada, de dos tercios, del Congreso”.

La mandataria hizo un llamado a aceptar la reforma, enfatizando que “no va a haber retroceso en la elección de jueces, magistrados y ministros (de la Suprema Corte) por una razón, porque es una decisión del pueblo de México”.

Además, criticó a Piña y a otros dos consejeros por haber votado en contra de una medida del Consejo de la Judicatura Federal (CJF) que aprobaba la entrega de listas de juzgados vacantes al Senado para iniciar el proceso de elecciones.

Sheinbaum también cuestionó la decisión de la Suprema Corte de aceptar una controversia constitucional presentada por partidos de oposición contra la reforma judicial.

“Los partidos políticos no tienen atribución, más que en algunos casos electorales, de presentar estos recursos y, a pesar de ello los aceptó, debería haberlos rechazado porque no tienen personalidad jurídica los partidos políticos para aceptarla”, argumentó.

En este contexto, defendió la reforma afirmando que “hoy el Poder Judicial tiene graves problemas de corrupción”.