A fin de poder cumplir con compromisos en materia de pago de salarios y prestaciones, la mayoría de los presidentes municipales se acercaron a la Secretaría de Hacienda para pedir ayuda económica, pero sólo ocho pudieron cumplir con los requisitos para obtener algún crédito de alguna institución bancaria, indicó el titular de esa dependencia, Jorge Michel luna.
El funcionario aclaró que “lamentablemente en esto no es cuestión de buena voluntad, y hay un buen número de ayuntamientos que pasan por una situación bastante crítica. No son sujetos de crédito, porque traen altos y añejos adeudos que les impiden ser beneficiados con recursos frescos”.
Entre aquellos que pudieron encontrar alguna salida positiva se encuentran, Jonacatepec, Temixco y Jantetelco. A ellos, abundó, los canalizamos con alguno de los bancos y se pudo hacer el acuerdo, las cantidades van desde los cinco hasta los 10 millones de pesos, con lo que salvan necesidades de urgencia, dijo.
“Bueno, hay un buen número de alcaldes que solicitaron una tregua en lo que se refiere al pago de anticipo de participaciones de años anteriores y que no han podido finiquitar. Tampoco eso es fácil, porque si les aflojamos más, entrarán en dificultades para cubrir los intereses”.
"Aquí sobresalen por pasivos muy altos, entre otros, Cuautla y Ayala, en total, hablaríamos de unas siete alcaldías, que por los déficits que presentan no podrían cumplir con las condiciones que fija la banca a fin de poder apoyarlos".
Michel Luna agregó que “nosotros no distinguimos a nadie, a todo aquel que llegó a tocar la puerta de la Secretaría, se le abrió y platicamos sobre el tema, por lo menos les ofrecimos alguna orientación respecto a las opciones que pueden tener para ir superando sus problemas”.
Lo más común es que se están sobregirando en algunos gastos y no tienen un buen control en el manejo presupuestal, la sugerencia es que hagan un esfuerzo por eficientar lo poco que tienen y eviten compromisos superfluos, consideró. Pero indicó que igualmente es común que se cometan errores como aquello de nombrar a amigos o incondicionales como titulares de finanzas o de la tesorería, aún cuando no se ajustan a los perfiles y no conocen mucho del manejo del dinero, eso continúa pasando en un buen número de comunas, advirtió el funcionario.