Cuernavaca, Morelos.- La magistrada presidenta del Tribunal Superior de Justicia (TSJ), Carmen Verónica Cuevas López, defendió el trabajo de los juzgadores y rechazó las acusaciones del obispo de Cuernavaca, Ramón Castro Castro, sobre la aplicación selectiva de la justicia.
A través de un comunicado, la representante del Poder Judicial del estado de Morelos aseguró que -a casi un año de su administración- no se han presentado ante el Consejo de la Judicatura quejas por la probable inadecuada actuación de los jueces o presuntos actos de corrupción.
“Cada juicio penal, civil, mercantil y hasta familiar dentro del TSJ se desahoga con total independencia y autonomía de los jueces, quienes tienen la obligación de resolver cada caso en estricto apego a derecho, respetando los principios de presunción de inocencia y el debido proceso, así como las garantías de las partes en conflicto”, dijo.
Recordó que en octubre del 2016 ordenó la rotación de los jueces del sistema de justicia penal y, recientemente, en el mes de enero, hubo cambios de adscripción de los jueces de primera instancia civil, mercantil y familiar, con la intención de evitar inercias de los juzgados.
Recalcó que con el sistema de justicia penal acusatorio adversarial se garantiza una justicia transparente, porque los juicios son públicos y se protegen los derechos del imputado en un hecho que la ley considera como delito.
Destacó que el Consejo de la Judicatura mantiene en escrutinio a los operadores de justicia e invitó al obispo de Cuernavaca a presentar pruebas e iniciar los procedimientos legales, en caso de que algún servidor público del Poder Judicial haya cometido algún acto ilegal de corrupción, para que se pueda investigar y aplicar las sanciones que correspondan.