Los diputados en el seno de la Junta Política y de Gobierno acordaron no dar a conocer estos robos para evitar los ataques de la prensa; sin embargo, ha trascendido que los congresistas buscan que el costo de estos automóviles sea cubierto por el seguro.
El primer robo fue efectuado a mano armada en agravio del presidente de la Mesa Directiva, Othón Sánchez Vela, quien fue despojado por dos tipos armados de una camioneta Nissan de lujo con un valor aproximado a los 500 mil pesos, y que era propiedad del Congreso local.
A principios de este 2010 los coordinadores parlamentarios acordaron la compra de dos camionetas para el uso de los presidentes de la Mesa Directiva y de la Junta Política y de Gobierno; no obstante, una de ellas fue entregada a la presidenta de la Comisión de Educación y Cultura, Lilia Ibarra Campos, y a pesar de que la misma le ha sido requerida por escrito, la legisladora se ha negado a devolver el lujoso vehículo.
Días después uno de los auxiliares del coordinador parlamentario del PAN, Luis Miguel Ramírez Romero, fue despojado de un automóvil Jetta, 2010, color blanco, con asientos de piel, a punta de pistola.
El diputado reconoció que a mediados del mes de julio su colaborador fue despojado de este automóvil; “fue un robo, y se cumplió con todos los requisitos, es decir, se inició la carpeta de investigación. Sólo que determinamos que no era conveniente darlo a conocer a la opinión pública”, confirmó el legislador, quien fue entrevistado vía telefónica porque este viernes asistió a un congreso de diputados panistas en Guanajuato.
Comentó que afortunadamente el automóvil contaba con seguro, y que ahora empleados administrativos de la Cámara de Diputados tienen tratos con ejecutivos de la empresa aseguradora para que le sea regresado al Congreso local el costo de este automóvil.